AMPLIACION: Investigadores chinos usan seda para desarrollar textil inteligente

BEIJING, 18 abr (Xinhua) -- Las expectativas de las personas en cuanto a lo que visten están aumentando y ahora buscan belleza, comodidad e inteligencia.

Un nuevo estudio publicado en la revista internacional Materiales Funcionales Avanzados señala que científicos chinos usaron seda de gusano de seda para desarrollar un textil inteligente que automáticamente puede contraerse y estirarse con el cambio de humedad.

El estudio indica que las mangas hechas de este textil inteligente pueden encogerse hasta 45 por ciento en dirección vertical cuando se exponen a humedad o sudor y luego recuperar su extensión inicial cuando el ambiente se torna seco.

La clave de esta característica es un músculo artificial de fibra desarrollado por investigadores de la Universidad de Nankai en Tianjin.

Los músculos artificiales de fibra son materiales que imitan los músculos naturales y pueden contraerse, expandirse o girar reversiblemente dentro de un componente ante un estímulo externo, como electricidad, temperatura, humedad y luz.

En este estudio, el músculo artificial fue hecho de seda debido a que la fibra natural es barata, cómoda y absorbe bien el agua.

Liu Zunfeng, el investigador principal, dijo que el estudio se inspiró en el mecanismo de expansión reversible del volumen de la fibra de seda. Después de que las moléculas de agua son absorbidas por la proteína de la seda, el volumen de la fibra aumenta y su porosidad cambia.

Los cambios en el volumen de la fibra y la transformación estructural después de la absorción y desorción del agua dará por resultado respuestas de contracción, expansión y rotación reversibles, lo que indica que la seda sería un prometedor candidato para textiles inteligentes sensibles a la humedad.

Además, los métodos de procesamiento de seda, como desgomado, teñido y resistencia térmica, garantizan la amplia aplicabilidad del músculo de seda.

El músculo de seda puede modificar la porosidad adaptándose al sudor, lluvia, humedad y temperatura.

"Cuando uno suda, la ropa tenderá a encogerse. Pero después de que el sudor se seca, el material se expandirá para mantenerlo a uno caliente", dijo Liu.

Aunque los investigadores no han realizado experimentos con humanos, consideran que los cambios de tamaño de la ropa no generarán incomodidad para la piel.

Los investigadores creen que el músculo de seda tiene amplias perspectivas.

"Debido a que la seda es muy abundante y económica, el músculo de seda abrirá camino a más posibilidades en textiles, medicinas y robótica blanda", comentó Liu. Fin