La popularidad de las locomotoras a vapor de Xinjiang en las redes sociales

Locomotora a vapor 

 

A Li He, conductor de locomotora a vapor de 55 años en Sandaoling, prefectura de Hami, en la región autónoma Uigur de Xinjiang, en el noroeste de China, nunca se le hubiera ocurrido que el lugar donde ha laborado 36 años se haya convertido de pronto en una sensación en la red. 

Mucha gente ha visitado Sandaoling, situado a más de 80 kilómetros de Hami, para ver las locomotoras a vapor después de que fotos y videos de ellas en pleno invierno asombraron a los internautas.  

Sandaoling solía ser la mina de carbón más grande de Xinjiang, con una gran producción de alta calidad. Más de 30 de estos vehículos funcionaban día y noche para transportar el carbón a las fábricas.

Sin embargo, con la disminución de la labor, el bullicio del lugar es cosa del pasado. La era de los trenes a vapor también se aproxima a su fin, después de que la manufactura de sus partes se suspendió y la gente empezó a prestar mayor atención a la protección del medio ambiente.

Todavía existen 4 unidades en servicio en las minas de Sandaoling, pero rumores sobre su pronto  reemplazo por camiones llevan circulando ya un buen tiempo.

Li, quien nació y vivió en Sandaoling toda su vida y a punto de jubilarse el 25 de marzo, no entiende realmente por qué la gente viaja miles de kilómetros a este pequeño lugar solo para ver “esta estructura de hierro sucia y rota”.

Desconoce los cambios por los que han pasado estos trenes desde la época industrial hasta los tiempos modernos. Sabe que sus compañeros dependen de ellos para vivir tanto como de las minas. 

La familia de Li se trasladó a Sandaoling en Xinjiang desde un parque industrial en el noroeste de China. Li empezó a trabajar en las minas en 1983 y obtuvo su licencia de operario en 1986. Desde entonces, la pequeña cabina de conductor devino en el lugar más importante de su vida. 

Li asegura que su oficio significa que debe ser capaz de soportar la soledad. Un turno dura 12 horas y 3 personas laboran juntos - el conductor, el segundo al mando y el fogonero.

Memeti Simayi es un antiguo colega. Ambos comenzaron juntos en 1984. Al hablar del próximo retiro de Li, Memeti se muestra un tanto celoso de que finalmente pueda descansar y se rehúsa a aceptar que ya no laborará con él.

Al ver a varios turistas tomar fotos de la locomotora, los compañeros se sienten contentos de ser reconocidos. Pero para Song Junfu, su futuro le inquieta. Con 46 años, pertenece a una generación más joven de operarios de trenes a vapor.

El último lote de estas unidades al servicio de las minas en Sandaoling por medio siglo muy pronto marcará el fin de una era.