Zara niega haber denigrado a una modelo asiática en su último anuncio

Una tienda de Zara en Chengdu, provincia de Sichuan, suroeste de China. 

La marca española de moda rápida Zara negó haber difamado a las mujeres asiáticas en medio de una avalancha de acusaciones de los cibernautas chinos después de que la compañía lanzara un nuevo anuncio para su línea de maquillaje.
Las fotos promocionales de las nuevas colecciones de pintalabios, publicadas el viernes en la página de Sina Weibo de Zara, muestran a la modelo china Li Jingwen con su icónica cara pecosa, lo que ha generado controversia en las redes sociales chinas.
Algunos cibernautas criticaron el anuncio y aseguraron que “esas imágenes con una modelo asiática con pecas y una cara sin expresión podrían influir negativamente en la impresión de los occidentales sobre las mujeres asiáticas y podrían llevar al racismo contra las mujeres asiáticas”.
La nueva línea de maquillaje está disponible en la sitio web de Zara en todo el mundo y no está dirigida al mercado chino, aseguró el domingo el servicio de clientes de la compañía al Global Times.  
Mientras más voces tomaban parte en el debate, Zara respondió a Pear Video que las fotos se tomaron en un estado natural sin ningún retoque final y que nunca se pretendió insultar a las mujeres asiáticas. La modelo fue seleccionada por la sede de Zara en España, donde la estética difiere de los gustos chinos, aseguró Zara.
Si bien algunas personas criticaron el anuncio, hubo muchas otras voces en línea que señalaron que las fotos eran auténticas y que el público debería estar abierto a diferentes estéticas y ser tolerantes con las caras reales e imperfectas en lugar de vivir en un espectáculo de belleza editado.
“La belleza o la fealdad no es el único estándar para las modelos. En cambio, los rostros que pueden impactar visualmente al público son bienvenidos en la industria del modelaje”, explicó al Global Times una blogger de arte y reconocida usuaria de Sina Weibo, “Airan”, asegurando que no creía que Zara fuera racista contra las mujeres asiáticas.
El debate se debió a los conflictos culturales y los entendimientos diferentes de belleza. Ya que la mayoría de los chinos consideran hermosas las mujeres con rostros limpios y brillantes, mientras que muchos occidentales admiran rostros naturales sin mucho maquillaje, concluyó.