¿Qué apoya el crecimiento económico de China?

Vista nocturna de Shenzhen

Las fricciones comerciales entre China y Estados Unidos ya han durado meses. Influenciadas por la política unilateral y proteccionista de los EE.UU., las relaciones entre los dos países podrían entrar en una nueva era, caracterizada por la coexistencia de cooperación y competición, así como el surgimiento continuo de nuevos problemas y contradicciones.

Aquellos que miran de manera perspicaz, han señalado que, a diferencia de Estados Unidos, que actúa de manera caprichosa, China siente lástima al momento de tomar medidas de represalia contra Estados Unidos. En lugar de esto, se enfoca en emplear al máximo su capacidad para superar la adversidad.

De acuerdo con el reporte de la Encuesta Entorno de Negocios 2018, publicado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en China, el 73 por ciento de las empresas estadounidenses encuestadas afirmó haber obtenido ganancias en China en 2017 y otro 74 por ciento planeaba aumentar su inversión en China en 2018. Casi todas las empresas encuestadas creían que China había realizado esfuerzos mejorados y constantes en materia de protección de la propiedad intelectual y su cumplimiento en los últimos años.

Además, el 62 por ciento de las empresas estadounidenses expresó que el procedimiento de formulación de políticas y comunicación de China se había vuelto cada vez más transparente en los últimos cinco años. Sin un entorno comercial estable, dichas compañías no habrían invertido activamente en China ni obtenido tantas ganancias.

La fuerza fundamental para el desarrollo económico de China es el esfuerzo de todo el pueblo chino. En los últimos 40 años, el número de entidades comerciales de China ha aumentado de 490.000 a más de 100 millones y cada día se fundan 18.100 empresas nuevas.

Este logro fue difícil de conseguir, sin embargo, China es sin duda la economía de mercado más grande con el mayor número de participantes en la historia de la humanidad. El entusiasmo, la iniciativa y la creatividad del pueblo chino se liberan a través de la reforma y apertura, así como la economía de mercado. Es una epopeya del espíritu emprendedor, también de la lucha y creación de cientos de millones de trabajadores chinos.

El desarrollo de China no es un vuelco de las teorías económicas. Al revés, muestra al mundo la importancia de respetar el principio de economía de mercado y la ley del valor.

China se ha convertido en una fábrica mundial a través de la reforma y apertura, la industrialización, la urbanización y la internacionalización del mercado. La división laboral refinada, a gran escala y profesional, apoyada por el enorme mercado, sirve de base para la gran capacidad de manufactura de la China actual.

La división laboral madura y completa, junto con el sistema de apoyo, permite a las empresas chinas fabricar eficientemente la mayoría de los productos en el mundo con buena calidad y de manera rentable.

El ecosistema de fabricación de China permite una innovación impulsada por la eficiencia, según un informe de 2015 de McKinsey & Company. De acuerdo con dicho informe, China tenía el ecosistema manufacturero más extenso del mundo, con una base de proveedores cinco veces más grande que la de Japón, 150 millones de operarios de fabricación e infraestructura moderna.

El informe señala que las ventajas de cadena de este ecosistema y la gran escala ofrecieron a los fabricantes chinos de hardware una ventaja de coste de alrededor del 15 al 20 por ciento sobre sus pares extranjeros. Gracias a las ventajas de China en el mercado y la producción, el país logró llevar rápidamente su sector de aplicaciones de Internet a la vanguardia mundial.

El poder competitivo de China es integral y actúa con una división y habilidad laboral compleja y rica, el cual no será reemplazado ni retirado.

En agosto, la Comisión de Comercio Internacional de los EE. UU. celebró una audiencia de seis días de duración para la Oficina del Representante de Comercio de los EE. UU. con el fin de decidir si se debe imponer aranceles adicionales a los productos chinos por valor de 200 mil millones.

En la primera reunión, la propuesta fue aprobada por solo 3 representantes de un total de 61, que provienen de industrias de manufactura de equipaje, ropa, elaboración de alimentos, semiconductores, bicicletas y químicos.

Un fabricante de bicicletas señaló que EE. UU. compró 18 millones de bicicletas terminadas desde el extranjero, el 94 por ciento de las cuales provenían desde China. Además, entre los 300 millones de piezas de bicicletas importadas, el 60 por ciento eran chinas. Dado que era imposible encontrar otros proveedores fuera de China, los aranceles adicionales traerían una presión fuerte sobre los consumidores y las fábricas estadounidenses.

China se ha beneficiado mucho de la apertura. La enorme afluencia del capital extranjero ha creado fuertes efectos secundarios en la tecnología, la gestión, formación de talentos y la cadena de suministro en China, lo que permite al país aprender rápidamente, y luego digerir, mejorar e innovar según sus propias características.

Las empresas chinas se han convertido en el motor principal de la innovación tecnológica en la fabricación de neveras, aires acondicionados y lavadoras, ya que la mayoría de los países desarrollados se han retirado de la fabricación y se centran principalmente en la construcción de marcas.

Además, algunas aplicaciones móviles potentes, como Alipay y WeChat, se crearon todas basadas en el entorno local de China. Muchas economías de mercados emergentes están "copiando" los productos chinos. Se dice que Tokopedia es la versión indonesia de Taobao, y Snapdeal, la versión india de Alibaba.