Noticias>
spanish.china.org.cn | 15. 10. 2018 | Editor:Estrella Zhang [A A A]

Estrategias que reviven una marca

Palabras clave: zapatos, marca, productos, artesanías

Cai Wenke, zapatero de Neiliansheng, trabaja en una tienda en Beijing. 

Tras un cambio de imagen, los zapatos a mano Neiliansheng conquistan a los consumidores más jóvenes

Juzga a un hombre primero por sus zapatos, así dice un antiguo dicho en Beijing. Puede parecer pasado de moda, pero demuestra que antes la gente de la capital valoraba mucho este accesorio.

Cai Wenke, zapatero de Neiliansheng, una marca china reconocida por sus modelos de “mil capas” hechos de algodón, considera que estoy se aplica aún hoy en día y él ha dedicado su vida a satisfacer esa necesidad por más de 10 años, tiempo que le ha servido para dominar la técnica del oficio.

"Comencé como vendedor en Neiliansheng en mis 20 y crecí curioso por la profesión. Como por ejemplo, ¿cómo se hace la suela? Me di cuenta que necesitaba al menos 2000 costuras, a veces 4200 por unidad”, comentó. "Le pregunté al supervisor si podía aprender y hago eso desde entonces”.

El proceso de hechura de un par requiere más de 100 pasos, desde el trazado del diseño, las capas hasta las puntadas.

"Se necesita 8 horas de labor durante 6 días para completar un par”, añadió orgulloso, resaltando que el método no ha cambiado en más de 100 años. "Debemos conservar la tradición y la herencia”.

Los zapatos de algodón de “mil capas”, una exageración porque en realidad son de 30 a 40-eran un lujo que solo algunos afortunados podían permitirse en el pasado. Su producción necesitaba al menos 48 horas, lo cual evidentemente no estaba al alcance del común de las personas.

No obstante, la industrialización trajo consigo la masificación de marcas exclusiva. Este factor junto al eterno diseño en blanco y negro del modelo significaron que la marca quedó rezagada tras otros íconos de la moda entre la generación más joven.

Cai, sin embargo, piensa que Neiliansheng tiene un futuro prometedor dado que muchas marcas tradicionales se han reinventado para llegar a este nicho en los últimos años.

Así, al colaborar con la japonesa Mitsui & Co y la sueca Happy Socks, Neiliangsheng ha internacionalizado su oferta, haciéndola atractiva a los ojos de los jóvenes, pero a su vez conservando sus características básicas.

En agosto, la empresa de 165 años abrió un local temporal en Sanlitun, una importante zona comercial de Beijing para presentar al mundo su nueva imagen.

"En su mayoría son los jóvenes quienes compran zapatos ahora”, afirmó Cai mientras mide la talla del pie de una clienta de 20 años en su establecimiento. La joven señala que se irá al extranjero por un tiempo por lo que necesita adquirir ropa y calzado. Contar con un par de Neiliansheng, difícil de encontrar en otro sitio, es algo que la atrae sobremanera.

Mientras Cai demuestra su talento en el oficio, quienes pasan por su tienda, no dudan en ordenar 25 unidades en dos tardes. "Ahora queremos también estar a la moda en diseño y forma”, destacó. "Hemos realizado patrones con derechos de propiedad intelectual como historietas”.

Cheng Xu, subgerente general de la empresa, expresó su deseo de que estas tiendas provisionales desechen estereotipos sobre mantener inalterables nombres de tradición.

De acuerdo con un reporte en el China Business Herald, desde el 2010, la compañía registró un crecimiento estable en ventas con ingresos anuales por encima de los 100 millones de yuanes ($14,58 millones).

Para alentar a que otras firmas similares abracen esta transformación y compitan con empresas modernas y con tecnología superior, un grupo de ministerios, entre ellos el de Comercio, publicó el año pasado una guía para promover artesanías, productos y tecnologías únicas en China.

Esta singularidad, las técnicas y el servicio han pasado de generación en generación. Son los responsables del espíritu de este oficio en el país y revisten un enorme significado para la economía, son las marcas locales y los valores culturales, confirmaron los lineamientos.

La investigación del Ministerio de Comercio arrojó que 1128 firmas entran en esta categoría, con una antigüedad promedio de 140 años.

"Al menos el 40 % de las marcas tradicionales se desarrollan bien. La mitad de ellas mantiene un rendimiento óptimo, mientras que el 10 % enfrenta problemas”, señaló Fang Aiqing, ex vice ministro.

Los datos oficiales muestran que 788 empresas analizadas por el organismo ganaron en total 9 billones de yuanes en 2017, un aumento del 6 % interanual, mientras que sus beneficios colectivos crecieron un 20 % a 765 800 millones de yuanes.

 


   Google+