Un camino acantilado conecta la aislada aldea de Shanxi con un punto turístico de moda

Un camino de 1.526 metros de largo construido a lo largo de acantilados conectó la aislada aldea de Shenlongwan, provincia de Shanxi, en el norte de China, con el mundo exterior.

Hace algunas décadas, los residentes de la aldea de Shenlongwan, en la profundidad de las montañas de Taihang, tenían que escalar sendos escalones a lo largo de los acantilados o desviarse a través de ocho pueblos para llegar al centro de la ciudad de Changzhi.

Para conectar la apartada aldea con el mundo exterior, los aldeanos locales comenzaron a construir el camino milagroso en 1985 y lo terminaron después de 15 años de duro trabajo.

Desde que el camino del acantilado entró en servicio en 2000, el paisaje único del pueblo de Shenlongwan ha atraído aún más visitantes, especialmente entusiastas de la caligrafía, la fotografía y la pintura. Muchos aldeanos que trabajaban en el exterior han regresado para ayudar a desarrollar el turismo y ofrecer a los turistas servicios de hospedaje rural.

A finales de 2015, los lugareños en la aldea de Shenlongwan habían salido de la pobreza gracias al auge del turismo impulsado por la carretera. La aldea recibió 300.000 visitantes en 2017, representando ingresos por turismo de 50 millones de yuanes ($ 7,72 millones).

Tramo de escaleras en los acantilados utilizado por los aldeanos en el pasado para llegar al asentamiento, ciudad de Changzhi, provincia de Shanxi. 13 de junio.