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spanish.china.org.cn | 23. 05. 2018 | Editor:Eva Yu [A A A]

150 denuncias de mujeres periodistas en Japón salen a la luz tras estudio sobre acoso sexual

Palabras clave: Mujeres periodistas, acoso sexual, Japón

Un estudio realizado a mujeres que trabajan para medios informativos japoneses arroja como resultado 150 casos de presunta acoso sexual denunciados por 35 mujeres. En un tercio de los casos, los abusso involucran legisladores, funcionarios del gobierno y agentes de la ley. El 40% de los casos ocurrieron en los lugares de trabajo de las periodistas.

La profesora de la Universidad Internacional de Osaka, Mayumi Taniguchi, experta en estudios de género, llevó a cabo esta encuesta después de un resonado caso de maltrato sexual a una periodista por parte del viceministro de Hacienda, Junichi Fukud, que poco después provocó su renuncia.

La encuesta ha descubierto que los presuntos hostigadores tienden a elegir víctimas vulnerables y propensas a ser intimidadas. Ya son varios casos en los que las mujeres se ven agredidas no solo verbalmente sino que también físicamente. Los atacantes no solamente tocan sino que además intentan besos a la fuerza. Muchas de las periodistas se ven obligadas a renunciar y en algunos casos piden auxilio en situaciones desesperadas.

Taniguchi indica que la encuesta muestra que algunas mujeres están comenzando a hablar inspiradas por movimiento #MeToo, que está creciendo en Japón, pero que otras dudan en hacerlo debido a la presión de sus superiores o el temor a perder a sus fuentes.

Incluso en la ciudad de Komae, en los suburbios occidentales de Tokio, el alcalde Kunihiko Takahashi se enfrentó el lunes a peticiones por parte de funcionarios de la ciudad de que dimitiera después de que una investigación interna confirmara presuntas conductas sexuales denunciadas por varias empleadas.

La igualdad de género es un tema apenas en desarrollo en la isla. El país está muy atrás en comparación con los países avanzados y las víctimas de abusos sexuales pueden ser criticadas por hablar, ya que en muchos casos su agresor es una persona influyente.

Muchas de las mujeres encuestadas dijeron que participaron en el estudio con la esperanza de evitar que reporteras más jóvenes sufrieran un maltrato similar.


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