Otros motivos detrás de los aranceles, afirman los expertos

La escalante disputa comercial comenzada por la administración de Trump no apunta al desbalance comercial entre China y Estados Unidos, sino a frenar la expansión del mercado tecnológico Chino, afirmaron expertos este domingo.

A medida que China mejora su base productiva a través del plan Hecho en China 2025, los Estados Unidos, la única superpotencia del mundo, no puede aceptarlo y ve el rápido desarrollo de China como una amenaza a su hegemonía global, afirmó Zhou Mi, investigador principal en la Academia China de Comercio Internacional y Cooperación Económica; un grupo de expertos del gobierno.

“Por consiguiente, es inevitable que los Estados Unidos adopten prácticas proteccionistas y unilaterales para frenar el crecimiento de China,” aseguró.

La desconfianza del gobierno de Estados Unidos en China puede evidenciarse en su reporte de Estrategia para la Seguridad Nacional publicado en diciembre, el cual menciona a China 33 veces y lo define como su “competidor”. La administración Trump alega que China intenta desafiar el estatus de Estados Unidos y supone una amenaza para la prosperidad y seguridad de Estados Unidos.

“EE.UU. se enfocó más en el sector servicios y gastó más de 5,5 trillones de dólares en guerras en Afganistán e Irak en los últimos 17 años. No prestó mucha atención al mejoramiento de sus sectores productivos, urbanización e infraestructura,” explicó Tu Xinquan, director del Instituto de China para estudios de la OMC en la Universidad de Negocios Internacionales y Economía de Beijing.

China, mientras tanto, realizó avances importantes en el desarrollo de tecnologías como 5G, chips de computador, energía nuclear, trenes de alta velocidad, navíos de alta gama y producción de aeronaves. También desplegó más recursos para promover la Iniciativa de la Franja y la Ruta y el Banco Asiático para la Inversión en Infraestructura para construir una red de comercio, inversión e infraestructura que conectara Asia con más regiones en el mundo.

Tu aseveró que tomando en cuenta la presión política y económica local, el gobierno de Estados Unidos tiene un motivo para proponer aranceles deliberadamente a las importaciones chinas. El llamado Artículo 301 de investigación lanzado en agosto para indagar sobre las prácticas de transferencia de propiedad intelectual y tecnología de China tienen como objetivo básicamente las industrias claves identificadas por el plan Hecho en China 2025.

El domingo, el presidente Donald Trump brindó alguna esperanza en la disputa comercial, trinando, “El presidente Xi y yo siempre seremos amigos, no importando lo que pase con nuestra disputa comercial. China quitará sus barreras comerciales porque es lo correcto. Los impuestos serán recíprocos y se llegará a un acuerdo en propiedad intelectual. ¡Gran futuro para ambos países!”