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spanish.china.org.cn | 18. 12. 2017 | Editor:Lety Du [A A A]

Nuevo portaaviones velará por la soberanía china

Palabras clave: portaaviones, China

Por Wang Jiaoxuan, experto en temas militares

 

El primer portaaviones completamente chino de pies a cabeza iniciará su etapa de pruebas muy pronto, acto que constituirá no solo el fortalecimiento del poderío naval del país, sino también de todo su sistema de defensa nacional. Si el modelo 001 Liaoning marcó el camino a seguir, el 001A liderará la modernización científica del sector. La todavía sin nombre nave de 50 000 toneladas cuenta con un diseño similar al Liaoning de 10 000 toneladas más con una cubierta estilo salto con esquí para el despegue y un generador convencional de turbina a gasolina.

La principal diferencia entre ellos es que la nueva máquina tiene más espacio para albergar aviones y helicópteros. Posee mejoras importantes en tonelaje, velocidad, sistema de radar y resistencia en comparación con el Liaoning. Además, presenta un mejor rendimiento de combate, el cual se verá reforzado con el uso de una catapulta como sistema de despegue en su segunda versión aún en fase de producción.

Una vez que el 001A reciba formalmente una comisión se convertirá en la nave bandera de la Marina china y asumirá tareas estratégicas de disuasión de mayor relevancia y entrenamientos militares en mar. No obstante, esto no significa que reste predominio al Liaoning.

Su predecesor tiene dos misiones principales a largo plazo, el primero de ellos pruebas y prácticas. El Liaoning está todavía en etapa de "exploración". Puede que presente algunas fallas técnicas, pero tiene experiencia en terreno lo cual ofreció a los ingenieros y expertos la teoría y la práctica necesarias para construir el nuevo modelo y continuará cumpliendo tan preciado rol.

Su segunda función es velar por la seguridad marítima. Aquellos que se preguntan sobre si la nave como una de entrenamiento es capaz de rendir en tiempos de guerra, deben saber que es un verdadero portaaviones militar y no un simulador, y que su eficacia saldrá a relucir a medida que avance la formación de su tripulación y madure la capacidad de sus ingenieros.

La principal razón de China para fabricarlos es garantizar la seguridad nacional, regional y la paz mundial, y no hay duda de que la máquina rendirá. Su desarrollo, todavía modesto y limitado, cumple por ahora solo una parte de su función de salvaguarda. Aquí es imperativo resaltar que el país nunca buscará la hegemonía marítima.

Considerando su costa, las numerosas islas, su vasto mar y las serias violaciones a su soberanía por algunos países, China seguirá produciendo portaaviones para satisfacer sus requerimientos mínimos de defensa.

Dado que dicha labor es un proyecto estratégico de gran inversión, la nación ha tomado en cuenta todos los factores involucrados, en especial el económico y el tecnológico, antes de enfrascarse en la misión de construir uno. Por ello, la idea inicial de fabricar 3 unidades en su momento estuvo justificada dada su disponibilidad de cuantiosos recursos en aquella época. Ahora que cuenta con un PIB de más de 11 billones de dólares, tiene los fondos suficientes para futuras obras similares.

Tecnología de punta también es un elemento primordial para desarrollar naves modernas y gracias al Liaoning y al reciente modelo 001A, China ha logrado acumular experiencia en tecnología aeronáutica y electrónica. Además, consigue progresos en energía nuclear, técnicas de camuflaje, inteligencia artificial y energía direccional, básicas en la producción de estos buques.

El portaaviones es un símbolo del poder de una nación y el núcleo de la capacidad de combate de las Fuerzas Navales. Asimismo, es un equipo militar esencial para velar por la seguridad del territorio marítimo. Solo cuando varias formaciones de portaaviones surquen los vastos océanos, se podrá hablar de una vigilancia efectiva de la soberanía china, una promoción de la reunificación nacional, una contención de las políticas de bloqueo de ciertas potencias y de una ayuda a la protección de los intereses marítimos de China, así como del mantenimiento de la paz en la región y más allá de sus límites.


 


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