El plan del PCCh para ofrecer viviendas a todos

Por Wang Yeqiang

Un complejo residencial en Beijing.

En el recientemente concluido XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China se reiteró que las casas son para vivir y no para lucrar, además se precisó que las medidas de control de su precio continuarán.

Las autoridades seguirán haciendo frente a la especulación para estabilizar el mercado de bienes raíces, pero dada la fuerte demanda en ciudades de primer y segundo nivel, es poco probable que su costo baje en el corto plazo.

Las iniciativas de control, sin embargo, podrían incluso ampliarse a urbes de tercer y cuarto grado. Y debido a la baja en el valor del activo, las instituciones bancarias y financieras redoblarán esfuerzos para fortalecer la supervisión de fondos a fin de evitar un flujo de recursos especulativos en el sector.

Asimismo, se tomarán los pasos necesarios para satisfacer la exigencia de mejora de las condiciones de vida. El Congreso decidió aumentar el grupo de generadores de ingresos medios e incrementar las rentas, y ya que sus miembros serán posiblemente el grueso de compradores de propiedades, estos seguirán aportando a la demanda media-alta y, por lo tanto, promoviendo un desarrollo sano y estable del ramo inmobiliario.

El cónclave concluyó establecer un sistema que garantice la oferta a través múltiples fuentes, suministre respaldo inmobiliario vía diferentes canales e incentive tanto la adquisición como la renta de propiedades. La primera alude a más fondos sociales para la vivienda en la reforma estructural por el lado de la oferta. La segunda indica la implementación de una serie de canales entre ellos inmuebles asequibles por parte de los gobiernos locales y propiedades de derechos compartidos. Por último, el tercer aspecto muestra la determinación de Beijing de desarrollar el mercado de alquiler, esto significa que su mejora, expansión e incremento de los inmuebles para tal fin serán componentes esenciales en la renovación del sector.

La renta de residencias será clave para aumentar la oferta y estabilizar el mercado. Para su desarrollo y ampliación, el Gobierno central ha establecido programas piloto en 12 grandes ciudades, entre ellas Shanghai, Hangzhou y Guangzhou. La oferta de terrenos para alquiler en estas localidades, algunos de ellos en buenas ubicaciones, ha avanzado considerablemente en los últimos años, lo cual evidencia que incluso las autoridades locales están dispuestas a sacar adelante al ramo.

La puesta en práctica de un sistema de vivienda que agrupe compradores potenciales e inquilinos cumplirá un rol decisivo en la promoción de la reforma y en la definición de un patrón de desarrollo a largo plazo del sector. Con esto se espera empujar a las promotoras inmobiliarias, agencias y compañías de administración de propiedades para que agranden sus negocios y pasen a un nuevo nivel, así como reforzar el respaldo financiero a las empresas afines.

La meta es lograr un sistema de varias fuentes, proveer apoyo inmobiliario vía diferentes canales y alentar la compra y renta para satisfacer los requerimientos de los nuevos residentes urbanos, llámese campesinos llegados a la ciudad, trabajadores migrantes y egresados universitarios de otras zonas.

El año pasado, el número de trabajadores del interior del país sumó 281,7 millones. Tal cantidad de personas sin una adecuada residencia en la ciudad no conduce a una modernización de la economía nacional ni a un desarrollo urbano. Quizá los comparativamente hablando nuevos residentes de altos ingresos, con la ayuda del mercado, puedan resolver sus problemas de alojamiento por ellos mismos, por lo que las autoridades deben tomar medidas que asistan a los que menos tienen en ese sentido.

Además, se debe velar por la oferta de vivienda a los de bajas y medianas rentas, impulsar la construcción de propiedades de derechos conjuntos y desarrollar un mercado de alquiler para dicho segmento. Así también, las políticas de seguridad en vivienda urbana deben apuntar a mejorar las condiciones de vida del mencionado grupo.

El autor es investigador del Instituto de Estudios Urbanos y Medioambientales de la Academia China de Ciencias Sociales.