Beijing adopta controles más estrictos para la mejora del aire

Beijing suspenderá las obras de construcción durante la temporada de invierno en un esfuerzo por mejorar la calidad del aire en la ciudad, anunció el sábado la Comisión de Vivienda y Desarrollo Urbano-Rural de la capital china.

La norma incluye tareas que podrían generar polvo como demoliciones y excavaciones desde el 15 de noviembre hasta el 15 de marzo, la época completa de calefacción.

El comunicado sigue a la publicación del quinto paquete de protocolos de respuesta de urgencia por contaminación del aire de la ciudad el viernes, que aumenta las prohibiciones en el sector manufacturero y los controles estrictos en la lucha con la niebla tóxica.

En comparación con las anteriores, esquema iniciado en 2012, esta edición refleja una tendencia más rígida frente a los contaminantes, por ejemplo, por primera vez, algunas labores, como rociado y pintura, no podrán realizarse si se emite alerta azul, el menor nivel de contaminación, lo cual constituyen las primeras medidas obligatorias en este estadio.

En Beijing como en otras ciudades chinas, el sistema de emergencia posee 4 escalas, azul para el más bajo, amarillo, naranja y rojo, cada una con una serie de implicancias como suspensión de actividades escolares, producción y tránsito vehicular.

Los protocolos restringen el funcionamiento de ciertas plantas durante la señal amarilla para reducir las emisiones de partículas dañinas, medidas que antes se daban con el nivel naranja.

El sistema, que entró en vigor el viernes, está publicado en la página web del gobierno municipal.

El criterio para alertas rojas se ha reducido a un pronóstico del promedio del índice de calidad de aire de 500 en un día. Previamente, ese estado debía continuar por más de 24 horas.

Este nivel genera los mayores controles. En una de esas alertas en Beijing en diciembre de 2016 por 5 días consecutivos, la producción se detuvo en más de 700 fábricas y se redujo en otras 500. Más de la mitad de los vehículos salieron de circulación.

"La dura postura para disminuir las emisiones han probado su eficacia en la mejora del aire”, resaltó Chai Fahe, investigador de la Academia China de Ciencias Medioambientales, y añadió que estas han bajado en un 30 %.

El Ministerio de Protección Medioambiental ha requerido esfuerzos conjuntos y respuestas coordinadas ante cualquier emergencia en la región Beijing-Tianjin-Hebei durante el invierno.

Para fines de año, la concentración de PM2,5－partículas de un diámetro menor a 2,5 micrómetros, debe ser menor de 60 microgramos por metro cúbico, según la Oficina de Protección de Medio Ambiente de Beijing.