Expansión del sistema ferroviario de alta velocidad en China

El tren de alta velocidad desde Hohhot en la región autónoma de Mongolia Interior hasta Ulanqab es la primera línea ferroviaria de su tipo en la región.

Ahora se puede llegar a las ciudades más importantes de China en tren bala gracias a la red que incluye conexiones a un gran número de rutas ferroviarias y a centros de transferencia más eficientes.

Según la Corporación de Ferrocarriles de China, la operadora nacional, los servicios de trenes directos de alta velocidad unen grandes urbes en diferentes regiones mediante el uso de más de una ruta ferroviaria, entre ellas Beijing-Kunming, Harbin-Shanghai y Chengdu-Guangzhou.

El recorrido entre Dalian, en la provincia de Liaoning, y Xi´an, en Shaanxi, requiere 8 tramos que conectan 18 ciudades medianas y grandes.

Operar el sistema no es una tarea fácil. En una línea como esta solo funciona un tren bala, pero se puede hacer uso de múltiples vías.

El diseño del punto de transferencia permite realizar el reemplazo de unidad con comodidad. Los pasajeros pueden planear sus viajes y comprar boletos con anticipación. Cuando llegan a la estación de cambio, pueden hacer uso de una entrada especial para abordar el siguiente servicio sin necesidad de salir. Esto permite compensar la falta de una ruta directa en algunas zonas y ofrecer opciones de viaje más convenientes.

La estación de Lanzhou Oeste, el principal centro de transferencia de la región autónoma Uygur de Xianjiang con el resto de China, tiene una capacidad de más de 5000 pasajeros diarios, indicó Wang Jian, el subjefe de la estación. La ruta Baoji-Lanzhou comenzó a funcionar en julio y Wang estima que el flujo de personas al día alcanzarán las 25 000. Esta ruta comunica Lanzhou con la red de alta velocidad.

La mayor parte de ciudades más allá de Lanzhou no tienen conexión directa con Xinjiang. Un viajero de Beijing puede acceder a esta urbe y luego cambiar en la estación Lanzhou Oeste hacia Xinjiang.

La red ferroviaria de alta velocidad de China ha sobrepasado los 20 000 kilómetros a lo largo de todas las regiones a nivel provincial excepto la región autónoma Hui de Ningxia. Las urbes de cambio se encuentran esparcidas por todo el país y están unidas por dicho sistema.

El servicio más largo del mundo recorre 2760 kilómetros desde Beijing a Kunming, de acuerdo con la Corporación de Ferrocarriles de China. Beijing tiene temporadas marcadas, mientras que Kunming es conocida por ser la “ciudad de la eterna primavera”.

Los lugares de partida y llegada difieren mucho entre sí por lo que se necesita modelos de trenes bala distintos que se adapten a las condiciones locales.

Durante el invierno, en la región del noreste, las temperaturas pueden bajar hasta los -40°C, por eso las máquinas deben ajustarse a tal situación. Los desiertos del noroeste presentan fuertes vientos y tormentas de arena, es así que la línea Lanzhou-Xinjiang cuenta con diseños a prueba de estas inclemencias.

De acuerdo con un plan emitido por la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo en julio de 2016, China expandirá su red ferroviaria de alta velocidad a 30 000 kilómetros para conectar el 80 % de las ciudades más importantes. Para el 2030, el sistema abarcará todas las urbes del país con una población de más de 500 000 habitantes.

Hasta el 2016 se contaba con 22 000 kilómetros, cifra que representa el 65 % del total mundial.

El servicio de tren bala más largo del planeta es de 2760 kilómetros desde Beijing a Kunming, en la provincia de Yunnan.

Las vías ferroviarias continuas de alta velocidad con mayor longitud del mundo van desde Beijing a Guangzhou, en la provincia de Guangdong, a lo largo de 2298 kilómetros.

China es el único país con unidades que alcanzan una velocidad de 350 kilómetros por hora, como por ejemplo los servicios Beijing-Tianjin, Beijing-Shanghai y Shanghai-Ningbo.