Las voces no cesan en contra del veto migratorio instaurado por el gobierno de Donald Trump en Estados Unidos. Esta vez la idea es impedir su puesta en vigor, tarea que inició Hawái la semana pasada y que será repetida por otros estados del país.

Washington, Oregón y Nueva York anunciaron este jueves que se unirán a Hawái para interponer demandas contra la nueva orden. En un principio, Washington y Minesota bloquearon la medida emitida en su primera versión el 27 de enero.

El martes pasado, Hawái presentó una demanda contra el decreto en Honolulu por considerarlo islamófobo. El escrito ha solicitado audiencia el próximo 15 de marzo, fecha en la que entrará en vigor la orden, en un intento por evitar que eso suceda.

Trump aprobó este lunes una versión revisada del veto original en la que suspende durante 90 días los visados a los inmigrantes de seis naciones de mayoría musulmana (Irán, Siria, Sudán, Libia, Somalia y Yemen) y durante 120 el programa de acogida de refugiados. A diferencia de la anterior, Irak sale de la lista, excluye a las personas que ya cuentan con residencia permanente, elimina el cese permanente de acogida a refugiados sirios y suprime toda referencia religiosa.