Al parecer Canadá privilegiará sus relaciones comerciales con Washington y dejaría a su suerte a México durante la revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Fuentes del gobierno canadiense indicaron que los intereses nacionales van primero y la amistad viene después y que ambas no se excluyen a sí mismas. Comentarios de corte muy duro y que reflejan la opinión de Canadá de que México será el más perjudicado con los posibles cambios.

Por el momento Ottawa no ha decidido su postura final sobre el tema debido a que se desconoce la posición inicial de Trump. Sin embargo, la ministra de Relaciones Exteriores canadiense, Chrystia Freeland, indicó que su país apoya el convenio en su esencia trilateral y destacó que el premier Justin Trudeau conversó con su par mexicano Enrique Peña Nieto el fin de semana.

Por su parte las mismas fuentes apuntaron que México y Canadá no tendrían muchas cosas en común. Trump ve con preocupación el gran déficit de Estados Unidos con su vecino del sur y se comprometió a imponer sanciones a las empresas que produzcan en dicho territorio. Una situación que no se repite con Ottawa.