El proyecto Sanbei Shelter Forest, una franja de bosque artificial a manera de cortavientos, iniciativa de China para evitar la expansión del desierto de Gobi, es capaz de absorber y eliminar dióxido de azufre, monóxido de nitrógeno y las partículas PM 2,5, de acuerdo con un reciente estudio de la Universidad de Lanzhou, el primero de su tipo en el país.

Ma Jianmin, profesor de la Escuela de Estudios Medioambientales de la Universidad, señaló que las franjas de bosque removieron y desecharon 1,1 millones de toneladas de dióxido de azufre y monóxido de nitrógeno entre 1982 y 2010, 50% de lo alcanzado por la zona forestal en el norte de China.

"El bosque refugio es muy importante para la mejora de la calidad del aire en el norte de China”, explicó el académico. Asimismo señaló que el proyecto retiró 30 millones de toneladas de PM 2,5 entre 1999 y 2010, esto es el 0,9% del total.

"Con la protección de estos espacios verdes, la resistencia al benzopireno, una sustancia altamente tóxica en las partículas 2,5 en el norte de China se ha reducido a la mitad”, apuntó Huang Taobo, doctor de la escuela.

El estudio indicó también un menor nivel de contaminación en el bosque que fuera de él. Los expertos estiman que la habilidad del proyecto para absorber y eliminar contaminantes orgánicos continuará en aumento. Para el 2050, se removerán 1,9 veces más de hidrocarburos policíclicos aromáticos en comparación a 1990.