Portada>Opinión
spanish.china.org.cn | 20. 12. 2016 | Editor: Lety Du [A A A]

Progresen, pero por favor, con estabilidad

Palabras clave: economía china

Por Jorge Fernández

 

Hasta hoy, el exceso de capacidad en algunos sectores de China representa, además de un lastre para el crecimiento, una caja de pandora por los peligros aparejados al cierre de empresas y al aumento intempestivo en la tasa de desempleo.

Si a esto se suma el daño latente de la especulación en el mercado inmobiliario o la creciente deuda global de China, el escenario podría ser altamente desfavorable para materializar el gran sueño de revitalización nacional.

Es por ello que la Conferencia Central de Trabajo Económico, celebrada del 14 al 16 de este mes, enfatizó en que la prioridad en 2017 se orienta hacia la estabilización en el sector inmobiliario y en el sector de las finanzas.

Es impostergable imponer límites a créditos destinados maliciosamente a la especulación en el mercado inmobiliario, un fenómeno que ha atestado dolorosos golpes a sectores populares, seriamente desgastados por el pago puntual de sus hipotecas.

La frase desprendida de la Conferencia “las casas son para vivir, no para especular” ha sido ampliamente difundida por redes sociales nacionales, lo que evidencia por duplicado la extendida aprobación popular por tomar acciones, por un lado, y la preocupación por los catastróficos escenarios que ocurrirían si llegase a colapsar este sector.

Los líderes de China han desplegado las directrices para el siguiente año, un 2017 en el que las políticas apuntarán a la gestión de riesgos potenciales, al tiempo que se emprenden acciones para atender problemas que de descuidarse pueden salirse de control.

El proceso de reforma rumbo a la materialización de los sueños está lejos de ser una marcha cómoda y exenta de sacrificios. Por el contrario, un control moderado del crecimiento económico debe convertirse en un marco viable para la profundización cualitativa de la reforma económica.

Y junto a la mejora de las reformas, áreas como el de las finanzas y el de la innovación se hacen necesarias, de cara al apoyo que requieren diversos sectores de la economía real, hasta ahora amedrentados por avales languidecientes.

En atención a la Conferencia Central de Trabajo Económico, China atestiguará un énfasis en la profundización de la reforma estructural, la que a su vez deberá redundar en la calidad de la producción, y sobre todo, en la competitividad.

China experimentará en 2017 la pavimentación activa de un camino orientado a avanzar sustancialmente la reforma de la propiedad mixta, principalmente en sectores estratégicos como la electricidad, el petróleo, el gas natural, los ferrocarriles, la aviación civil, las telecomunicaciones y el militar.

Las cartas están echadas para entender el curso que tomará 2017, un año en el que se celebrará el XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China, y en el que la constante deberá ser la búsqueda del progreso, pero sobre todo, el mantenimiento sustentable de la estabilidad.

   Google+

Comentarios (Total 0 comentarios)

Tu comentario
Nombre
Anónimo
Comentarios (0)

Más vistos