Los dos astronautas que completaron la misión espacial tripulada más larga de China regresaron a la Tierra esta tarde sanos y salvos.

La misión de vuelo tripulado de la Shenzhou-11, de más de un mes de duración, ha sido "un completo éxito", dijo el comandante en jefe del programa espacial tripulado del país, Zhang Youxia.

El viceprimer ministro y miembro del Comité Permanente del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), Zhang Gaoli, emitió una nota de felicitación del Comité Central del PCCh, del Consejo de Estado (el gabinete de China) y de la Comisión Militar Central en el centro de mando del programa espacial tripulado de China en Beijing.

La conclusión de la misión del Tiangong-2 y la Shenzhou-11 "marcó un avance importante" en el programa espacial tripulado de China, señala el mensaje de felicitación.

El mensaje indica que con el liderazgo del Comité Central del PCCh con el camarada Xi Jinping como núcleo, la gente de la industria aeroespacial de China ha implementado las estrategias de desarrollo conducido por la innovación y de integración civil-militar.

Sus esfuerzos para progresar y superar los desafíos, así como su colaboración y sacrificio, demuestran la confianza en el camino, teoría, sistema y cultura del socialismo con peculiaridades chinas, añade el mensaje.

El módulo de reingreso de la Shenzhou-11 se separó de la cápsula de orbita de la nave espacial a las 13:11 hora local de Beijing hoy y luego se separó de la cápsula propulsora, lo que puso fin a la misión de 33 días y comenzó el viaje de regreso a la Tierra.

El módulo de reentrada de la Shenzhou-11 aterrizó de forma segura en el lugar en el que se esperaba, en la región autónoma septentrional de Mongolia Interior, a las 13:59 horas del viernes, hora de Beijing.

El equipo de búsqueda terrestre alcanzó el lugar de aterrizaje de inmediato y los astronautas, Jing Haipeng y Chen Dong, abrieron la escotilla de la cápsula por sí mismos.

El equipo de tierra informó que ambos se encuentran en buen estado. Los dos astronautas llegaron a Beijing el viernes en la noche y permanecerán en cuarentena y serán sometidos a revisiones médicas.

La Shenzhen-11 es la sexta nave espacial tripulada de China y ésta es la misión más larga del país hasta el momento.

Tras su lanzamiento el 17 de octubre, la nave se acopló dos días después al primer laboratorio espacial de China, el Tiangong-2, en el que los dos astronautas pasaron 30 días.

La misión transportó personal y materiales entre la Tierra y el Tiangong-2 y probó los procesos de acercamiento, acoplamiento y retorno.

Se realizaron experimentos médicos aeroespaciales, experimentos de ciencia espacial y mantenimiento en órbita.

Los dos astronautas también realizaron tres experimentos diseñados por estudiantes de enseñanza secundaria de la región administrativa especial de Hong Kong, como el de criar gusanos de seda en el espacio.

Se trata de la tercera misión espacial para el veterano astronauta de 50 años Jing Haipeng, el comandante de la tripulación, quien también participó en las misiones de la Shenzhou-7 y la Shenzhou-9. Para Chen Dong, de 38 años, fue su primera misión espacial.

La misión es un paso clave en el objetivo de China de construir una estación espacial tripulada permanente.

El módulo central de la estación espacial china se lanzará, según las previsiones, en torno a 2018, y la estación espacial comenzará a funcionar plenamente alrededor de 2022, con una vida diseñada inicial de al menos 10 años.

En ella vivirán entre tres y seis astronautas, que se quedarán en el espacio hasta un año.

El Tiangong-2 se mantendrá en operación en órbita tras el regreso a la Tierra de la Shenzhou-11 y esperará para acoplarse con la Tianzhou-1, la primera nave espacial de carga de China, que será lanzada en abril de 2017 para verificar la tecnología de reabastecimiento, que es clave en cualquier estación espacial.

Algunas tecnologías nuevas claves para apoyar las misiones espaciales tripuladas largas se probaron en órbita, señaló la diseñadora en jefe adjunta del Centro de Astronautas de China, Huang Weifen.

Por ejemplo, un aparato de ejercicio de correr, crucial para las misiones del laboratorio espacial de mucho tiempo, se puso a prueba y ayudará a guiar la investigación y desarrollo futuros.

Durante la misión, también se probaron un sistema de consulta médica a distancia, que une al laboratorio espacial con el centro espacial en la Tierra, además de ultrasonidos médicos y el cultivo de plantas. El cultivo de plantas ha demostrado ser un medio adecuado y efectivo de ajuste sicológico, agregó la diseñadora.

Además, el desempeño excelente de los astronautas verificó la eficacia de los sistemas de reclutamiento de astronautas y de capacitación de China, dijo.