Hoy es mi tercer día a bordo del Tiangong-2. Soy Chen Dong y soy corresponsal especial de Xinhua en el espacio.

Estar en el espacio por primera ocasión es algo inusual, por decir lo menos. Al principio sentía que no podía controlar mi cuerpo. No podía caminar y algunas acciones simplemente se sentían extrañas.

Mi hermano mayor Jing Haipeng realmente me ha ayudado a adaptarme a la vida aquí arriba y poco a poco me estoy acostumbrando a la sensación de ingravidez. Y ¿saben? lo estoy disfrutando cada vez más.

Duermo bien y creo que eso se debe a que durante las horas que pasamos despiertos estamos tan ocupados que me duerno tan pronto como cierro los ojos en la noche. ¿Que si he soñado? Creo que sí por todas las cosas nuevas que estoy experimentando durante el día. Definitivamente soñé con la sensación de ingravidez.

Antes de estar aquí en el espacio, yo estaba muy emocionado por la vista desde nuestra claraboya. Me sentí tan impresionado por la visión de nuestro hermoso planeta que me aseguré de mirarlo varias veces para realmente grabar su imagen en mi mente.

Mientras yo estaba hipnotizado con la imagen de la Tierra, mi hermano Jing me preguntó cómo me sentía. Lo único que pude decir fue que era muy hermosa. No encontré más palabras para describir lo que sentí en ese momento.

Puesto que estar en el espacio no tiene que ver sólo con la vista, pues tenemos mucho trabajo que hacer, tuve que asimilar tanto como pude en unos cuantos minutos. Pero siempre tendré el recuerdo de este maravilloso momento.

Todavía no he visto el amanecer o el atardecer, sólo el día y la noche. Estoy seguro de que llegará el momento en que pueda ver los dos.

En cuanto a tomar fotografías o grabar videos, quiero reunir tanta información visual como sea posible, tanto para el mundo como para mis propios recuerdos.

Me enteré de que Xu Sidan, un estudiante de la escuela para sordos de Hangzhou, me hizo una pregunta con la aplicación móvil de Xinhua. Xu me preguntó si he visto algún extraterrestre.

¡Qué hermosa imaginación tiene este niño! Todavía no he visto extraterrestres, pero tengo la esperanza de que veré extraterrestres y muchas otras cosas peculiares.

Otro niño me preguntó si los seres humanos se marean en el espacio. Aunque la nave espacial es una "nave", esto no es como estar en el mar o en un auto. La sensación de ingravidez no provoca mareos. Es una sensación maravillosa, muy, muy buena.