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spanish.china.org.cn | 15. 07. 2014 | Editor: Eva Yu | [A A A] |
Por Jorge Fernández Montes
La opinión pública de las grandes economías emergentes, en especial la de China, presta especial atención a la Sexta Cumbre de los países BRICS, a celebrarse los días 15 y 16 de julio en la ciudad brasileña de Fortaleza.
Durante la cumbre de Brasil, los países del grupo anunciarán el establecimiento de un Banco de Desarrollo, institución que replantea el esquema del orden financiero internacional desarrollado desde los acuerdos de Bretton Woods en la posguerra.
El municipio chino de Shanghai, uno de los centros económicos más importantes de Asia, se perfila junto con Nueva Deli como la sede de un banco que a partir de 2016 orientará sus activos a los creación de infraestructura en los país en desarrollo.
Con un capital total inicial de 100 mil millones de dólares, el banco refleja el cometido de las economías emergentes de apuntalar un nuevo orden financiero en el que las economías emergentes tienen voz y autoridad en la toma de decisiones.
Shanghai posee ventajas competitivas que podrían acelerar las tareas de los BRICS. La ciudad tiene una sólida infraestructura, medios de transporte e instalaciones para la comunicación, elementos que facilitan su vinculación con instituciones financieras de todo el mundo.
A esto se suma la estabilidad política y económica de China, que pese a su enorme población y las oscilaciones del sistema financiero internacional, ha mantenido un equilibrio constante y un desarrollo creciente desde el inicio de la política de reforma y apertura.
China cuenta con una de las reservas más grandes en divisas extranjeras, un elevado volumen comercial y de inversión, y una tasa de crecimiento superior a la de las grandes economías emergentes.
En los prolegómenos de la Sexta Cumbre de los países BRICS, la agencia de noticas rusa ITARTASS publicó declaraciones de Yuri Ushakov, asistente del presidente Putin, quien aseguraba que la sede del banco de desarrollo de los países BRICS estaría en Shanghai y que llevaría por nombre Nuevo Banco de Desarrollo.
Si bien la información referente al establecimiento del banco y a su sede será confirmada entre el 15 y el 16 de julio, el establecimiento de la sede del banco en Shanghai podría desempeñar un papel clave para impulsar la diplomacia china y sus contactos con otras economías emergentes, incluidas las latinoamericanas.