Una nueva perspectiva

Tao recuerda claramente la última vez que vio a su compañera, quien tenía cáncer en el colon. “La apodábamos ‘gordita’ debido a su complexión robusta. Pero cuando me paré junto a su cama en el hospital, sólo pude ver una mujer enjuta. Llevaba un par de aretes de oro, pero sus orejas parecían trozos de papel de baño, delgadas y cafés” señaló.

Unos días después del encuentro, Tao se enteró de la muerte de su amiga cuando vio una corona con su nombre en una tienda de productos para funerales. Una segunda compañera, que tenía cáncer en el recto, murió un año después. Tao sabía de la gravedad de su condición cuando notó que las venas en sus manos eran café oscuro y no azules, como resultado de la quimioterapia que recibía.

“Fue muy difícil para mí. Varios meses antes de conocer su enfermedad, viajamos al hospital para visitar a nuestra amiga que tenía cáncer de colon” dijo Tao. “Tenía una hija de cinco años. Su muerte fue realmente abrumadora para su familia”.

Luego de la muerte de las mujeres, los 20 compañeros de clase sobrevivientes empezaron a reunirse más regulamente, encontrándose en fiestas especialmente convocadas o en restaurantes. “Nuestra relación se ha vuelto más cercana. También pasamos más tiempo con nuestras familias y otros amigos. Nada es más certero que la muerte” señaló.

Las muertes de sus amigas dejaron atónita a Tao, quien habiendo sido la persona de más peso en su clase, decidió perderlo por razones de salud. Tras dos años de ejercicio y una dieta más saludable, perdió 15 kilos. “Las muertes de mis dos compañeras me recordaron de ser más consciente sobre la importancia de la salud” explicó Tao.

El Grupo de Cuidado de la Salud Ikang Guobin, una de las compañías de cuidados de la salud más grande de China, emitió un informe basado en más de 100.000 estudios individuales de cuidados de la salud a nivel nacional en 2012. El informe indicaba que las personas de mediana edad, aquellos de entre 40 a 60, tenían los mayores riesgos de problemas de la salud, especialmente obesidad, presión sanguínea alta y enfermedades cardíacas.

Sin embargo, los problemas de salud varían de región en región. En Shanghái en 2012, la tasa de incidencia de hígado graso y problemas de la tiroides fue mayor que en muchas otras regiones y casi tres veces más alto que en las provincias de Zhejiang y Cantón. En Beijing, casi la mitad de aquellos estudiados tenían sobrepeso o eran clínicamente obesos.