Ya casi hemos olvidado el encanto de viajar en coche recorriendo cientos de kilómetros y teniendo más tiempo para mirar por la ventana y observar el paisaje que nos rodea. En muchos rincones del planeta se pueden encontrar carreteras que harían las delicias de cualquier conductor. Todos estas rutas no solo se forman de bellos parajes que te harán perder la cabeza, también contienen difíciles y complicadas curvas que suponen todo un desafío para los conductores más atrevidos.