Para que los turistas tengan una idea del tamaño de la comunidad más grande de Miao, se construyó un mirador en la orilla oeste del río. Desde allí, se ve una vista increíble. Los miles de casas de un estilo similar se apilan unas sobre otras, cubriendo las dos sierras. Todo ello forma un todo armónico y es imposible distinguir unos de otros. Este magnífico paisaje sorpresa s todos los turistas.

La mayoría de los hogares Miao fue construido en las laderas escarpadas. El camino para subir del pie hasta la cima de la colina parece corto, pero en realidad dura casi mediodía. En este camino, el turista tiene la compañía del río y del humo que sale de la cocina de los hogares Miao hacia el cielo. Además, no es raro ver una vaca que camina muy lento en el camino. Todas estas cosas le dan encanto a la aldea.