En el pasado, en la época del emperador Guangxu, en este lugar se reunía la gente a beber té y asistir a espectáculos de ópera. Hoy es una de las casas encantadas más célebres de China. Se dice que fue construida sobre un antiguo cementerio en el que se enterraban los cuerpos que no habían sido reclamados y quedaban abandonados. Cuando un millonario del sur llegó al lugar e hizo constuir el edificio del salón, las voces y lloros de los que allí habían sido sepultados podían aún escucharse.