La ola del turismo nocturno, iniciada en la década de 1980, demostró la existencia de una demanda de actividades sanas de ocio por la noche. El 90 por ciento de los animales de la zona tropical se mantienen activos en la noche, sobre todo después del atardecer, porque la temperatura es adecuada en este periodo. Es una suerte que en Singapur generalmente se ponga el sol a las 19:30 y la noche sea muy agradable, con pocas lluvias. Las condiciones naturales favorables permiten que las actividades por la noche sean idóneas.