Los taxistas de Beijing deben evitar los olores desagradables en sus vehículos, ya que pueden afectar a la imagen de la capital china durante los Juegos Olímpicos 2008, afirmó un miembro del órgano asesor político nacional.

Shi Xiangpeng, quien participa en la sesión anual del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino ( CCPPCh), señaló que, según su propia experiencia, casi una tercera parte de los taxis de Beijing huelen mal.

"Recuerdo una vez que subí en un taxi que tenía un olor repugnante en su interior. Pensé que sería algo brusco bajarme de inmediato, así que opté por quedarme y abrir las ventanas, a pesar del frío que hacía", recalcó Shi, miembro de la CCPPCh, quien visita Beijing con bastante frecuencia.

Shi atribuye el olor a las malas costumbres de algunos taxistas que viven en las afueras de la capital, ya que en ocasiones toman siestas y comen comidas que llevan cebolla y ajo dentro de sus vehículos de trabajo.

Además, algunos taxistas no se duchan con frecuencia y fuman en el coche, añadió.

Shi espera que los taxistas presten más atención a su higiene privada para que el interior de los taxis permanezca limpio y agradable.

Beijing cuenta con 2,9 millones automóviles registrados, de los cuales, 67.000 son taxis.

(05/03/2007, CIIC-Agencia de Xinhua)