Las personas que compren recuerdos Olímpicos con la esperanza que algún día valgan una fortuna deberían de respirar y contar hasta 10 antes de gastar su dinero, manifestó un experto el martes.
Li Xiang, de la Asociación de Coleccionistas de China, indicó que aunque el valor de algunos objetos puede aumentar a primera vista, su interés disminuirá con el paso del tiempo. Por ejemplo, en 1997, las monedas conmemorativas emitidas para marcar el regreso de Hong Kong a la parte continental se vendían por 500 yuanes (73 dólares USA) cada una antes del acontecimiento, pero poco después, su valor cayó hasta menos de 20 yuanes, indicó Li.
“Las personas deberían de prestar más atención al valor cultural e histórico de los objetos que coleccionan,” comentó él.
“Invertir en los recuerdos Olímpicos puede generar grandes ganancias, pero es también muy arriesgado.”
Xiao Lin de Shanghai, quien ha estado coleccionando recuerdos Olímpicos durante 15 años, expresó: “El valor de la mayoría de los objetos del coleccionista depende de cúantos habían en circulación.”
Actualmente, el recuerdo Olímpicos más valioso es el billete de banco conmemorativo de 10 yuanes emitido por el Banco Popular de China,” comentó él.
“Sólo se produjeron 6 millones de billetes, y ahora están siendo vendidos por 1.000 yuanes cada uno, 100 veces su valor nominal.”
No obstante, no todos los objetos son buenas inversiones.
El dueño de un puesto anónimo en un mercado de sellos en Guangzhou indicó que el valor de algunos sellos Olímpicos emitidos hace meses ya ha caído más del 50%. Sin embargo, con más de 7.000 recuerdos autorizados del BOCOG – desde barras de oro hasta alfileres de corbata – ofrecidos, hay una gran elección por los coleccionistas e inversionistas.
Wang Xingyun, un coleccionista amateur de Tianjin, declaró: “Los recuerdos Olímpicos son bastantes significativos para los chinos, ya que son un recuerdo eterno de los Juegos de Beijing.”
“El primer objeto que compré fue un alfiler para marcar la cuenta atrás de 400 días,” comentó el estudiante de posgraduado de 24 años.
Aunque al principio Wang no consideró el alfiler como una inversión – él señaló que el interés surgió por la calidad del trabajo y el valor cultural – está encantado de descubrir que su valor ha aumentado.
“Compré el alfiler por 36 yuanes, pero me han informado que ahora podría valer 500 yuanes,” concluyó él.