La mujer, considerada el sexo débil durante muchos siglos, logró un lugar preponderante en la lucha por la conquista de las medallas olímpicas en los Juegos Veraniegos de Beijing, clausurados el domingo pasado.
China alcanzó en estos juegos olímpicos, por primera vez en su historia, el primer lugar en el medallero de oro (51 doradas) y una cosecha total de 100 preseas, en su mayoría ganadas por las mujeres (57).
Además, las mujeres superaron a los hombres en la obtención del metal dorado, con 27 por 24 del sexo "fuerte".
No obstante, el logro de las mujeres chinas se vio ensombrecido por fracasos deportivos que impiden hablar de "victoria total".
Mientras el país vibraba con las esperadas medallas en deportes como la halterofilia, el tenis de mesa o la gimnasia, y con otras inesperadas en vela, remo y voleibol de playa, algunas de las grandes estrellas fallaron estrepitosamente.
La presencia local en los podios de los deportes más mediáticos, como el atletismo o la natación, fue más bien escasa.
En el deporte "rey" de los Juegos Olímpicos, como se considera al atletismo, fueron las mujeres las que sacaron la cara, con la obtención de dos preseas de bronce, la de la maratonista Zhou Chunxiu y la de su compañera Zhang Wenxiu en lanzamiento de martillo.
En la delegación de Estados Unidos se mostró un equilibrio entre las mujeres y los hombres.
Ambos sexos colaboraron con igual número de preseas (53 y 53) de las 106 que se llevó ese país en los juegos veraniegos, aunque hay que destacar la actuación de Michael Phelps, quien colaboró con ocho metales dorados de los 20 que ganaron los hombres. Las damas obtuvieron 15 medallas de oro.
Sobre las medallas de plata ganadas, las mujeres fueron más productivas con 23 por 13 de los hombres, mientras que en el bronce, fueron 15 para las damas y 20 para los varones.
La delegación australiana también reflejó la superioridad femenil en la competencias olímpicas con más representantes en los podios: 23 mujeres por 21 hombres, con 8 preseas doradas, 7 de plata y 8 de bronce para las primeras y 6, 6 y 9 para los segundos.
Holanda fue el país en el que la mujer fue infinitamente superior al hombre. De los 14 metales que consiguió, 11 fueron de mujeres y sólo 3 de varones, los cuales lograron 1 oro y 2 bronces; las damas cosecharon 5 oros, 4 plata y 2 bronce.
Usain Bolt hizo que las miradas de todo el mundo giraran en torno a su país, Jamaica, con la conquista de tres medallas de oro, las únicas para los hombres, e igualó el mismo número de récords mundiales, pero no logró que el sexo femenil levantara el mayor número de preseas
Las mujeres jamaiquinas obtuvieron 3 medallas de oro, 3 de plata y 2 de bronce, de las 11 que se llevaron los representantes caribeños.
Rumania se unió al dominio femenil, de las 8 preseas: sólo una ganaron los varones, de bronce, mientras que las damas consiguieron 7 (4 de oro, 1 de plata y 2 de bronce).
El seleccionado de fútbol varonil de Corea del Sur fue el único que pudo conseguir un metal para su país, de bronce; las cinco fueron ganadas por las mujeres con 2 de oro, 1 de plata y 2 de bronce.
Otro país que tuvo en las mujeres a sus máximas ganadoras fue México, con tres medallas, una de oro y una de bronce con María Rosario Espinoza en taekwondo y con Paola Espinosa y Tatiana Ortiz, en los clavados sincronizados. El otro metal fue obra de Guillermo Pérez, en taekwondo.
En Rusia, país considerado como potencia mundial, el hombre continúa marcando la pauta, aunque las mujeres, principalmente la bella Yelena Isimbayeva, colaboraron para que lograran el tercer sitio en el medallero olímpico, con 72 preseas. Los varones cosecharon 40 metales: 12 de oro, 8 de plata y 20 de bronce; en tanto que las damas conquistaron 11 oros, 13 plata y 8 bronce.
Pero también hubo delegaciones en Beijing, como la de Zimbabwe, en la que los hombres no obtuvieron ninguna presea; las cuatro que se lograron fueron obtenidas por las damas, entre ellas una de oro y 3 de plata.
Otra representación deportiva en la que los varones se fueron en blanco fue Bélgica, ya que las dos que obtuvieron fueron obra de las damas.
Hay que destacar que hubo otros países en las que las mujeres regresaron con las manos vacías como Latvia, República Dominicana, Estonia, India, Irán, Barhain, Panamá, Túnez, Trinidad y Tobago, Irlanda, Serbia, Bahamas, Kyrgyzstán, Tajikistán, Ecuador, Islandia, Malasia y Sudáfrica.
De los 240 países que estuvieron presentes en los Juegos Olímpicos de Beijing, sólo 81 pudieron colocarse en medallero para repartirse 938 preseas, entre oro, plata y bronce; 159 regresaron a casa sin una medalla en los equipajes.