spanish.china.org.cn | 08. 11. 2021 | Editor:Teresa Zheng | Texto |
Un niño recibe la vacuna en el distrito de Baiyun en Guangzhou, provincia de Guangdong, sur de China, 27 de octubre de 2021.
Muchas regiones recomiendan no adquirir productos de regiones peor afectadas en el extranjero
Dado el avance de la COVID-19 en China, la urgencia de vacunar a los menores entre 3 y 11 años es mayor, señalaron funcionarios y expertos.
El último brote ha afectado a 44 ciudades en 20 provincias, con otros 50 casos locales el sábado; entre ellos 21 en Hebei, 9 en la nororiental Liaoning y 6 en Heilongjiang, según datos oficiales.
Los expertos instaron a acelerar la inmunización completa y refuerzos para alcanzar la inmunidad de rebaño lo antes posible frente a la amenaza doble del invierno y la variante delta.
Desde el surgimiento del virus en Wuhan el año pasado, se han dado 30 brotes locales por casos importados. Los contagios relacionados ya suman 918 del 17 de octubre al 5 de noviembre en 44 ciudades de 20 provincias, según la Comisión Nacional de Salud.
Wang Qinghua, inmunólogo principal del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades, destacó la urgencia de vacunar a los niños en una rueda de prensa en Beijing el sábado.
"Solíamos pensar en una baja incidencia de COVID-19 en los niños, pero a medida que la pandemia se extiende a nivel mundial, hemos visto un incremento de casos en este segmento, con tasas de cuadros graves y mortalidad por encima de las de la influenza en algunos países... y la de hospitalización, más de 10 veces más alta que a principios de este año ", constató Wang.
La inmunidad infantil es parte de la estrategia de China para llegar a la inmunidad colectiva a través de la inmunización. Las vacunas inactivadas han demostrado un nivel fuerte de protección en los ensayos clínicos y las reacciones adversas no son más altas que en los adultos, agregó.
Las más recientes estadísticas indicaron que al 29 de octubre, se han administrado más de 3,53 millones de dosis a menores de entre 3 y 11 años en todo el país. La comisión apunta a completar la inoculación voluntaria del grupo para fines de diciembre.
Tao Lina, especialista en vacunas de Shanghai, sostuvo el domingo que los niños pueden devenir fuentes de infección en los hogares y que la inyección puede evitar que transmitan el virus y causen nuevas infecciones grupales, lo cual demuestra la importancia de su inmunización.
El último resurgimiento de la COVID-19 en China tocó a las escuelas y jardines infantiles en al menos cuatro lugares: Beijing, Gansu, Hebei y Heilongjiang.
Zhenzhou, capital de la provincia de Henan en el norte, también detectó 30 casos hasta el domingo, 19 de ellos estudiantes de nidos, escuelas primarias y un colegio de nivel secundario.
Tao manifestó que China necesita acelerar la campaña de vacunación infantil y recomienda que el país continúe abogando por sus beneficios, así como en apaciguar el temor de los padres.
Un trabajador del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Zhejiang dijo el domingo que cooperan con los centros educativos para promover la inmunización entre los menores de 3 a 11 años. A fin de aliviar las preocupaciones públicas, la escuela recurrirá a las redes sociales y a campañas públicas para difundir los beneficios de la vacunación.
Asimismo, el experto en enfermedades respiratorias, Zhong Nanshan, dijo que la protección de las dosis dura aproximadamente seis meses y que es necesario recibir un refuerzo para fortalecer la inmunidad. A fines de año, al menos el 80 % de la población en China debería haber recibido dos dosis, recalcó.
Desde mediados de octubre, ciudades como Xian, Guangzhou, Hefei y Beijing, han lanzado campañas de inyecciones de refuerzo para grupos clave como la policía, los bomberos y el personal educativo, de atención médica, transporte y logística.
El fin de semana, como parte de los esfuerzos para reducir el riesgo de casos importados, muchos lugares fortalecieron el control de bienes procedentes del exterior y han advertido a sus residentes no comprar productos de regiones donde la epidemia golpea con más fuerza.
Esta medida llega con la cercanía de la campaña comercial de “Doble 11” el 11 de noviembre y el resultado positivo de mercancía de Mongolia adquirida por residentes de Erenhot, en la región autónoma china de Mongolia Interior.
Las provincias que incluyen a Heilongjiang, Mongolia Interior, Shandong y Hunan, han recordado a su población evitar la adquisición de artículos importados y a los servicios postales y de mensajería detener la entrega de productos de zonas azotadas por el virus en el extranjero.
Para evitar la infección proveniente de afuera y romper la cadena de transmisión vía el comercio, el condado de Xunke en Heilongjiang requirió a las firmas de logística y mensajería sellar los bienes importados en un área designada e informar al grupo de prevención y control de alimentos congelados local. Asimismo, alentó a la gente a supervisar y reportar cosas compradas en áreas de riesgo del exterior.
Muchas jurisdicciones alegan que si los residentes necesitan comprar o ya lo han hecho productos importados, deben informar a sus comunidades, aldeas o centros laborales. Quienes no lo hagan y causen riesgos de transmisión u otras consecuencias graves asumirán las responsabilidades de ley.
Se aconseja a los consumidores que planeen adquirir artículos importados vía terceros solicitar a los proveedores resultados de pruebas de descarte antes.
En tanto, alrededor de 25 000 personas en puestos de alto riesgo en puertos están bajo una administración cerrada, con pruebas cada dos días, informaron funcionarios del Ministerio de Transportes.