Un 98,3 % de encuestados chinos culpa a EE.UU. del descontrol de la pandemia

Médicos transfieren a un paciente desde una ambulancia al hospital Coral Gables en Miami el 16 de agosto de 2021

Una última encuesta muestra que el 95,7 % de los jóvenes chinos no entienden el comportamiento de Estados Unidos en la tarea de prevención y control de la epidemia COVID-19, y el 98,3 % culpa al país del empeoramiento de la pandemia.

Según el portal de noticias chino Cyol.com, el sondeo realizado por el Comité Central de la Liga de Juventud Comunista de China y el Centro de Encuestas Sociales del Diario de la Juventud China agrupó a 41 332 participantes. Ante la pregunta sobre cuál es el punto más escandaloso sobre la respuesta estadounidense a la epidemia, el 86,7 % de los encuestados señaló su enfoque orientado a la economía y el desprecio por la vida humana. El 81 % afirmó estar sorprendido de que los políticos estadounidenses estuvieran ocupados con las elecciones y hayan demorado la lucha vírica.

Los datos muestran que más del 75 % cree que la falta de sentido común de Washington y de respeto por la ciencia llevaron a la prevalencia de ideas poco intelectuales, un fenómeno que se ha visto reflejado en su ineficiente accionar frente a la pandemia. El estudio también reveló que más de tres cuartos de los jóvenes indicó estar impactado con el creciente racismo en la nación.

Para Dong Xinyang (seudónimo), egresado de traducción al inglés, lo que más destaca es la irresponsabilidad. "Estados Unidos tiene el equipo médico más avanzado del mundo, gran cantidad de trabajadores de la salud e instituciones desarrolladas de investigación médica, pero el Gobierno descuidó la amenaza del virus", apuntó, y añadió que es muy irresponsable emitir ayudas para cubrir la depresión económica interna.

Otra alumna de posgrado Li Xin dijo que una de las principales razones para dicha reacción fueron los comicios presidenciales. El exmandatario Donald Trump señaló que el virus era un engaño para ganar el proceso electoral, pero sus declaraciones hicieron que el país perdiera el mejor momento para luchar contra a la enfermedad. Hasta el día de hoy, ambas partes siguen enfrascadas en conflictos sobre las medidas a seguir. "La politización de la epidemia ha obstaculizado a Estados Unidos en todos los sentidos".

Más del 60 % de los encuestados cree que el alto costo de la atención médica, las políticas deficientes, los sectores sin contenido y la carencia de material antiepidemico contribuyeron al rápido avance de la epidemia en el país.

 Alrededor del 96,1 % calificó su desempeño general como "malo", con un 86,5% como "muy malo". Y el 95,7 % le pareció difícil entender cómo quien cuenta con el mayor número de casos y muertes en el mundo, culpa a China en lugar de centrarse en el control de su propia situación vírica.

Hasta ahora, existen casi 40 millones de contagios confirmados y más de 630 000 muertes en Estados Unidos.

"Estados Unidos padece el mal del 'hambre por un enemigo'", dijo un investigador de relaciones internacionales llamado Xu. Para él la sociedad estadounidense carece de cohesión interna, pero le importa mucho su supremacía. "Consideran a China un rival y constantemente encuentran formas de encararlo. Para ellos, lo primordial es eludir su responsabilidad y atacar a China. Su Gobierno no solo no ha asumido su compromiso internacional, sino que además ha tenido un impacto devastador en la cooperación global contra la epidemia".