Sinovac podría actualizar su vacuna en 10 semanas

Vacuna de Sinovac

En medio de la preocupación general por la variante india de la COVID-19, que al parecer es más virulenta y contagiosa, los expertos chinos apuntaron que los fabricantes de vacunas chinas podrían producir dosis adecuadas contra ella en aproximadamente dos meses.

El comentario llegó cuando uno de ellos Sinovac, cuya vacuna ya se utiliza en más de 30 países, declaraba en el periódico TA KUNG PAO que la compañía  está estudiando diferentes mutaciones y una opción actualizada podría producirse a más tardar en 10 semanas, luego de cultivar la cepa con éxito.

Su portavoz, Liu Peicheng, declaró a los medios el martes en una de las plantas de la empresa en Beijing sobre los estudios al respecto, un paso vital antes de producir nuevas vacunas.

Con los preparativos en orden, la producción de una opción actualizada será mucho más rápida, dijo, y agregó que Sinovac ha utilizado su vacuna a gran escala en Brasil, Chile y en zonas con otras variantes con una buena protección.

Los expertos sostuvieron que la velocidad resaltada por el laboratorio no es una exageración. Después de obtener la cepa mutada, los fabricantes solo deben reemplazar la semilla en el fermentador sin otro ajuste o procedimiento.

Todo podría terminar en dos meses, con un ensayo en animales o uno en humanos en fase I para su uso de emergencia, detalló Tao Lina, experto en vacunas de Shanghai.

La versión original de la vacuna inactivada puede ofrecer una protección ligeramente menor contra el virus mutado, pero una tercera dosis de la nueva podría otorgar una inmunidad mayor, explicó.

Los especialistas indicaron que existe evidencia insuficiente respecto a si la B.1.617 de la India y clasificada por la OMS como "de preocupación" puede reducir la eficacia de las vacunas actuales. Agregaron que ya que la epidemia en la India es inestable y las variaciones podrían seguir llegando, no es un momento adecuado para seleccionar y cultivar una determinada cepa.

Yang Zhanqiu, director adjunto del departamento de Biología de Patógenos en la Universidad de Wuhan, dijo el miércoles que escoger una para una vacuna inactivada es un proceso complejo que generalmente se lleva a cabo al final de una epidemia para dar con la variante de mayor impacto.

Sin embargo, los expertos intentaron aliviar el temor público al alegar que las vacunas actuales aún pueden brindar protección contra gran parte de las mutaciones pese a la disminución de su eficacia. La investigación y el desarrollo de vacunas van por delante de las mutaciones, aseveraron.

Indicaron además que la vacuna actualizada de Sinovac puede elevar su status en el altamente competitivo mercado internacional con las dominantes vacunas ARNm en Occidente, dado que dicho proceso puede ser más célere debido a la tecnología más madura usada, mientras que mayores pruebas son necesarias para actualizar las de ARNm porque dicha tecnología rara vez se ha aplicado en el mundo real antes de la pandemia.