Concierto para experimento COVID en Barcelona congrega a 5.000 personas

Unos 5.000 fanáticos se dieron cita para un concierto masivo donde la única protección contra el nuevo coronavirus fue el tapabocas en el Palau Sant Jordi Arena.

Las escenas parecían impensables en Europa después de un año de distanciamiento social, los fanáticos bailaban cerca uno del otro. Los controles de salud en la entrada retrasaron el inicio del concierto, pero no pudo contener el espíritu de celebración.

"¡Bienvenido a uno de los conciertos más emocionantes de nuestras vidas!" El cantante principal Santi Balmes le dijo a la multitud a un rugido de vítores.

El concierto aprobado por el gobierno sirvió como prueba para conocer si los eventos similares podrán volver a iniciarse.

80 enfermeras con equipo de protección personal completo adelantaron las pruebas pre-concierto en tres ubicaciones de Barcelona.

Al mediodía, tres de las 2.400 personas habían dado positivo para coronavirus o habrían entrado en contacto con un caso positivo, reveló el Dr. Josep Maria Libre, un médico que supervisó las pruebas. Los casos positivos no pudieron asistir al concierto y recibieron un reembolso de sus entradas.

Los asistentes recibieron sus resultados de pruebas de antígeno en 10 a 15 minutos a través de una aplicación en sus teléfonos. La prueba y una máscara se incluyeron en el precio del tiquete.