spanish.china.org.cn | 21. 09. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

Un estudio de Shanghai encuentra que los pacientes con COVID-19 recuperados tienen protección inmunitaria persistente

Palabras clave: COVID-19, protección inmunitaria

El último estudio realizado en Shanghai ha determinado que la mayoría de los pacientes con COVID-19 recuperados tienen una protección inmunitaria persistente y la vacunación puede desencadenar una respuesta inmunitaria duradera.

Los resultados del estudio se publicaron en Frontiers of Medicine, una revista médica general internacional patrocinada por el Ministerio de Educación de China, el 16 de septiembre, indicando que los anticuerpos neutralizantes que pueden proporcionar protección a los pacientes con COVID-19 de una segunda infección pueden durar alrededor de seis meses en esos pacientes.

Basados en el análisis de muestras de tres grupos de pacientes: 15 casos entre dos semanas y un mes, 20 casos entre uno y dos meses y 17 casos entre seis y siete meses después de la infección por COVID-19, los investigadores encontraron todas las muestras de plasma de 17 casos eran positivas para ambos anticuerpos IgG de seis a siete meses después del diagnóstico, pero los niveles fueron más bajos que los de las muestras recolectadas entre dos semanas y dos meses después del diagnóstico.

El estudio también encontró que existían anticuerpos neutralizantes, que se consideran anticuerpos protectores contra el virus, existió entre todas las muestras recolectadas ocho casos entre dos semanas y dos meses, y 14 entre seis y siete meses después del diagnóstico, y permanecieron altos entre seis y siete meses después de la infección.

Los resultados podrían tener relevancia clínica para evaluar la posibilidad de reinfección y la eficacia de la vacuna. En agosto se informó que un hombre de 33 años que vivía en Hong Kong se había infectado por segunda vez este año. Los medios de comunicación dijeron que la segunda infección del hombre ocurrió 142 días después de la primera.

Más tarde se reportaroncasos individuales similares alrededor del mundo, lo que también provocó preocupaciones públicas sobre si un paciente recuperado de COVID-19 podría infectarse por segunda vez.


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