Shanghai modifica sus políticas de cuarentena

Pasajeros en el Aeropuerto Internacional de Pudong en Shanghai el 10 de agosto de 2020.

Las políticas de cuarentena para viajeros internacionales en Shanghai con destino final en las provincias vecinas de Jiangsu, Zhejiang o Anhui presentarán ciertas modificaciones el sábado, indicó el jueves el grupo líder del gobierno de Shanghai para la lucha contra la COVID-19.

Si bien la duración de la cuarentena para los pasajeros entrantes sigue siendo de 14 días, las personas que se dirijan a las tres provincias antes mencionadas y den negativo después de tres días de aislamiento en Shanghai－en lugar de los 7 actuales－finalizarán los 11 días restantes en la ciudad de destino, en lugares designados, según la nueva directriz.

Aquellos que muestren síntomas, den positivo o tengan contacto cercano con pacientes de COVID-19 durante su periodo de confinamiento en Shanghai, permanecerán en la metrópolis para recibir tratamiento u observación médica.

El ajuste no se aplica a personas que vayan a otros lugares, ellos continuarán su cuarentena en Shanghai durante los 14 días.

Aquellos cuyo destino sea Shanghai, todavía pueden cumplir su aislamiento de 7 días en un hotel, más 7 días en casa si se dan las condiciones adecuadas, que incluyen residencia fija, prueba de ácido nucleico negativaal quinto día en el hotel y cuarentena domiciliaria obligatoria para quienes vivan en el mismo apartamento.

Quienes no cumplan con los requerimientos o no deseen hacerlo, pueden optar por el hotel los 14 días.

La cuarentena en el hogar durante los 14 días se aplica a viajeros no aptos para un aislamiento en hotel como ancianos, menores, mujeres embarazadas, personas con discapacidades o quienes necesiten cuidar de sus padres ancianos o niños pequeños en el hogar. Después de pasar la prueba de ácido nucleico al llegar y califiquen para una cuarentena domiciliaria, dichos viajeros podrán solicitarla por los 14 días completos.

Shanghai comenzó a adoptar medidas de aislamiento para pasajeros entrantes el 6 de marzo. La Organización Mundial de la Salud declaró el brote de COVID-19 una pandemia 5 días después. Los viajeros de 4 países, incluidos Italia e Irán, fueron sometidos inicialmente a controles epidemiológicos por funcionarios de aduanas y a una cuarentena de 14 días. Desde el 26 de marzo, todas las llegadas debían cumplir dichos controles y pruebas de ácido nucleico en un esfuerzo por prevenir el aumento de casos importados.

Fu Chen, director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Shanghai, indicó que la gestión de circuito cerrado de la ciudad consta de trespartes. La primera se activa a la llegada de la persona al aeropuerto. Quienes presentan síntomas son enviadas en ambulancia al hospital para un examen más detallado, mientras que otras toman vehículos asignados rumbo a instalaciones de aislamiento, precisó.

La segunda es el proceso de transporte, desde aeropuertos hasta centros cuarentena; y la última es la gestión en estas instalaciones con profesionales de monitoreo de enfermedades, así como personal médico y de servicio de clínicas y comunidades locales.

Hasta el jueves, Shanghai había reportado 587 casos importados y ninguna transmisión local desde marzo, excepto una en mayo, una mujer de visita desde Wuhan, provincia de Hubei.