spanish.china.org.cn | 20. 07. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

Modelo aplicado en Beijing podría detener el brote de Urumqi en seis semanas: expertos

Palabras clave: Urumqi, Beijing, COVID-19

Pasajeros pasando por el área de monitoreo de temperatura corporal en el hall de la estación de trenes de Beijing, en Beijing, capital de China, 18 de junio de 2020. Luego de elevar la respuesta de emergencia ante la COVID-19 del nivel III al nivel II en Beijing, la estación de trenes de Beijing implementó medidas estrictas para prevenir y controlar la propagación de la epidemia.


Más de un mes después, los funcionarios y expertos que participaron en la conferencia de prensa antiepidémica de Beijing se quitaron las máscaras una vez más, anunciando que la capital de China relajaría su respuesta de emergencia ante la COVID-19 de Nivel II a Nivel III a partir del lunes, ya que no se han reportado nuevos casos confirmados de COVID-19 en aproximadamente dos semanas, el período de incubación del virus.

Los observadores creen que el enfoque de Beijing, que ha controlado efectivamente la propagación del último rebrote epidémico en 40 días, es especialmente valioso para otras ciudades chinas como la Región Administrativa Especial de Hong Kong y Urumqi en la Región Autónoma Uygur de Xinjiang en el noroeste de China, que actualmente reportan rebrotes de COVID-19, así como para cualquier otra zona donde se reporte un brote esporádico.

Urumqi había reportado 30 casos confirmados para el sábado, poniendo a las autoridades en “pie de lucha” en la prevención y control de epidemias. Se suspendieron todo tipo de reuniones y actividades públicas, y se implementó el hermetismo en los conjuntos residenciales en Urumqi.

Hong Kong fue testigo de un récord de nuevos casos de COVID-19 que superó la centena el domingo, con un total de casos confirmados en la ciudad que excedieron el número de casos de SARS en 2003.

Yang Zhanqiu, subdirector del departamento de biología de patógenos de la Universidad de Wuhan, comentó para medios locales que la clave para aprender del enfoque antiepidémico de Beijing es encontrar el origen del virus que causó el último brote. Beijing aplicó rápidamente una gestión estricta en regiones cercanas al mercado mayorista de Xinfadi.

Dado que el origen del último brote aún se desconoce, las tácticas cautelosas de Urumqi son sólidas. Sin embargo, el enfoque de Beijing no se basó en la exageración, sino en las medidas de detección, observación y aislamiento para contactos cercanos, que también vale la pena calcar, sostuvo Yang.

Urumqi está llevando a cabo exhaustivamente investigaciones epidemiológicas y realizando una desinfección exhaustiva en áreas clave para eliminar las fuentes de infección del virus.

Todas las personas en cuarentena se habían sometido a las pruebas COVID-19 para el domingo por la tarde, y los casos recientemente confirmados y asintomáticos también se encuentran en cuarentena, aclaró el Centro Urumqi para la Prevención y Control de Enfermedades en una conferencia de prensa el domingo.

Wang Peiyu, subdirector de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Beijing, aseveró que el "enfoque de Beijing" es un modelo para que otras ciudades chinas puedan lidiar con un brote local repentino, y sirve como una forma factible y efectiva de contener el nuevo resurgimiento en un lapso de seis semanas, así como brotes esporádicos en el futuro.

El "enfoque de Beijing", según Wang, significa implementar medidas de manera precisa y normal, en lugar de un bloqueo completo como se vio en la etapa inicial del brote de Wuhan y Suifenhe.

Para ser precisos, las autoridades de salud dividieron la ciudad en diferentes zonas de riesgo de diferentes niveles y realizaron pruebas exhaustivas y a gran escala de ácido nucleico para grupos clave y personas en zonas de alto riesgo, explicó Wang, aclarando que, de esta manera, la vida y el trabajo de las personas en las zonas de bajo riesgo no se vieron muy afectadas.

Wang argumentó que hay tres nodos más importantes cuando se practica el enfoque de Beijing: la detección temprana del caso y el lugar donde se originó el brote; seguimiento de contacto cercano e investigación epidemiológica a gran escala; y gestión de varios niveles en el grado de riesgo.

Ambos expertos creen que el "enfoque de Beijing" sostiene su enfoque en las medidas de prevención normales, incluida la higiene personal y el conocimiento de la detección temprana y la presentación de informes.

Según el gobierno municipal de Beijing, bajo el Nivel III, Beijing mantendrá restricciones de capacidad de visitantes del 50 por ciento en atracciones turísticas, museos, gimnasios y bibliotecas. Exposiciones, eventos deportivos y otras actividades se reanudarán gradualmente. Los espacios subterráneos oscuros y húmedos con poca ventilación ya no se utilizarán como locales comerciales y de negocios.

Beijing aplicará estrictamente medidas de prevención y control en los mercados de alimentos, restaurantes, sitios de construcción, fábricas y otros puntos clave, y establecerá un sistema para monitorear la salud ambiental en los mercados de alimentos e informar los síntomas de los empleados, anunciaron los funcionarios del gobierno municipal.

Beijing no ha reportado casos confirmados durante 13 días consecutivos desde que estalló el nuevo brote vinculado al mercado de alimentos de Xinfadi el 11 de junio. Un total de 335 casos locales confirmados fueron reportados en Beijing, 132 en hospitales y 203 curados y dados de alta a partir del 11 de junio al 18 de julio, de acuerdo con la Comisión Municipal de Salud de Beijing.


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