spanish.china.org.cn | 13. 11. 2019 | Editor:Teresa Zheng | Texto |
Empleados brasileños ensamblan televisores en la fábrica SEMP TCL en Manaos, capital de Amazonas, en el norte de Brasil.
A China y Brasil, pese a los miles de kilómetros que los separan, los une estrechos vínculos económicos y comerciales. En los últimos años, ambos han estimulado un progreso más sólido y han logrado varios resultados en lo que a cooperación en este campo se refiere.
Las estadísticas muestran que China se ha mantenido como el mayor socio comercial y destino de exportación de su par sudamericano durante 10 años consecutivos. El comercio bilateral continúa en alza, con un record en volumen comercial en 2018 de más de 100 000 millones de dólares.
La colaboración económica y comercial pragmática facilita su desarrollo común y beneficia a sus pueblos.
Ricardo Santin, director ejecutivo de la Asociación Brasileña de Proteínas Animales (ABPA), señaló que visitó China en cinco ocasiones y que notó los cambios gracias a un desarrollo económico estable y rápido.
Junto con él viene aparejada la mejora significativa en las condiciones de vida y la creciente demanda de los consumidores chinos por productos cárnicos de alta calidad, afirmó. Agregó que Brasil necesita aprovechar las oportunidades que presenta este vertiginoso avance.
La nación es la exportadora mundial número uno de carne de res y pollo, y en los últimos años, las ventas han sido notables. Los especialistas indican que la fuerte demanda china resulta un importante motor de impulso.
Gracias a sus exportaciones al país asiático, su venta al exterior total de carne de res aumentó más del 20 % interanual en los primeros 7 meses de 2019, según datos a la mano.
Para fortalecer la cooperación con China, la Asociación estableció una oficina de representación en Beijing y continuó expandiendo su negocio.
"Mi esposa acaba de tener un bebé y estamos planeando comprar una casa más grande", apuntó Caucate, un empleado de SEMP TCL, una fábrica en Manaos, capital de Amazonas, en el norte de Brasil.
Hace apenas 3 años, cuando se retiró del ejército, a Caucate le preocupaba que no pudiera conseguir un trabajo bien remunerado en medio de una economía alicaída, pero con la llegada de SEMP TCL, su vida dio un giro de 180 grados.
Esta empresa conjunta nació en 2016 gracias a la unión de la marca china de electrodomésticos TCL y SEMP, el principal productor del rubro de Brasil, con una inversión total de 200 millones de BRL (1 BRL= 0,24 US$).
TCL ha traído consigo tecnologías y equipos de alta gama como el sistema automático de inspección óptica 3D, el de gestión de datos de TV en red y el equipo de embalaje inteligente. La capacidad del centro en Manaos creció de un millón a 3 millones de unidades.
La cooperación con la empresa china ha mejorado enormemente la industria en Brasil, dijo Paulo Sandrini, gerente de la base de producción.
Fabricamos televisores ultradelgados, inteligentes y de pantalla grande líderes en el ramo, señaló, y añadió que las ventas de la línea de lujo representan más del 20 % del mercado brasileño.
Según Sandrini, la marca china ganará en competitividad con más inversión en investigación y artículos personalizados al gusto local.
China optimiza constantemente su plan de inversión y ha extendido sus campos de interés en Brasil recientemente.
Las firmas con financiamiento chino han expandido sus sectores de inversión en Brasil desde la agricultura y la minería hace varios años hasta las telecomunicaciones y la energía eléctrica ahora, según destacó el Ministerio de Economía brasileño.
En julio de 2015, la Red Eléctrica Nacional de China ganó la licitación para la construcción de la segunda fase del proyecto de energía de ultra alta tensión de Belo Monte. Las obras comenzaron en agosto de 2017.
Con una longitud total de 2538 kilómetros, la línea de transmisión cruza 81 ciudades en 5 estados, llevando energía limpia desde la selva amazónica en el norte a las principales áreas de consumo en el sureste del país.
Durante los trabajos, la compañía china aportó experiencia y tecnologías, reconocidas y adoptadas por su contraparte local.
El 25 de octubre de 2019, el presidente chino Xi Jinping y su homólogo brasileño Jair Bolsonaro estuvieron presentes en la firma de operación del proyecto en el Gran Salón del Pueblo en Beijing, lo cual indica que este ha entrado oficialmente en su fase comercial.
La cooperación pragmática ha rendido frutos reales para ambos pueblos, resaltó Marcos Troyjo, viceministro de Economía de Brasil.
Lo que la República Popular China ha logrado desde su fundación en 1949, especialmente desde la reforma y la apertura en los últimos 40 años, cuenta como uno de los mayores milagros en la historia de la economía mundial, constató.
Asimismo, sostuvo que el comercio bilateral ha crecido rápidamente gracias a la continua apertura de China y que el potencial es grande en cooperación económica y comercial, tras una mayor integración de sus estrategias de desarrollo.