La Iniciativa de la Franja y la Ruta estimula a Italia para vincularse con China

Turistas chinos posan para una foto con un equipo de patrullaje conjunto compuesto de policías de Italia y China.

Turistas de China son recibidos con anuncios de bienvenida en sus propio idioma tras arribar al AeropuertoFiumicinode Roma, el más grande y dinámico eje aeroportuario de Italia.

Saliendo “con todo” para causar una buena impresión en los turistas chinos, el personal de la industria turística italiana pone sus ojos sobre las oportunidades que hay en los intercambios turísticos y comerciales entre Italia y China.

En 2017, Italia registró cerca de 1,5 millones de turistas chinos, según la Academia de Turismo de China, una entidad pública adscrita al Ministerio de Cultura y Turismo. Conjuntamente, generaron en 2017 más de 5 millones de estancias nocturnas, 12,4 por encima de la misma cifra registrada el año anterior, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas de Italia.

Personal de esta industria trabaja ingentemente para fortalecer los servicios y ajustarse al cambiante mercado turístico, especialmente de cara a las constantes mutaciones del gusto de los visitantes chinos.

“El perfil de los turistas chinos ha cambiado en los últimos años, en armonía con la evolución rápida de la población china, y de su ingreso promedio”, explica Jacopo Sertoli, presidente de la Compañía Bienvenidos Chinos, con sede en Shanghai, y añade que la recreación se vuelve cada vez más importante para los chinos.

Por su parte, “el interés de los italianos hacia China ha evolucionado y cambiado parcialmente en años recientes, y nuestra oferta se ha ajustado en este sentido”, indicó Laura Grassi, gerente jefe del operador turístico italiano Chinasia, el primero y más longevo que gestiona los flujos de salida hacia China desde principios de la década de los 80.

Chinasia ha acumulado mucha experiencia a lo largo de más de tres décadas. “Al principio, los tours de China atraían mayoritariamente a italianos de clase media alta, instruidos y con un promedio de edad de 40 años”,explica Grassi. Hoy, los clientes tienen un perfil variado. “Tenemos a jóvenes estudiantes, quienes hablan un poco de chino mandarín y quieren tener este tipo de experiencia; tenemos a muchas parejas, y familias con niños también”, explicó.

No es fortuito que Italia fortalezca su sistema educativa para capacitar a personal orientado al sector terciario.

En la Universidad Europea, ubicada en la noroccidental capital italiana, los grados de licenciatura y maestría en gestión turística constituyen ofertas educativas clave, con un énfasis especial en la educación relacionada a la cultura china.

‘Nuestro estudiantes de posgrado deben tomar antropología cultural, porque es crucial para ellos aprender hábitos, tradiciones y gustos del influjo del creciente turismo”, indica Alessandra Romano, directora de la maestría en Gestión Turística de la Universidad Europea.

El programa de maestría se enfoca más en los “nichos del mercado”, más que en el turismo masivo, como lo explica el profesor, en el sentido de que “más profesionales de alto nivel y más funciones administrativos son requeridas”.

Explicó que “pese a todo, todavía creemos que hay un “nicho” de muy alto nivel en los viajeros chinos, los mismos que tienen mayores necesidades, y esto es una oportunidad crucial que no podemos dejar pasar”. Las esperanzas de Italia en el sector son muy altas en términos de crecimiento y de empleo, especialmente considerando la naturaleza aletargada que ha revelado recientemente la economía.

El turismo contribuyó en un 13 por ciento del PIB de Italia en 2017, según el informe publicado en febrero por la sucursal del Centro Nacional de Investigación.

Las personas empleadas en la industria constituyeron un 14,7 por ciento de la fuerza de trabajo de Italia en 2017, y cerca de 250 mil nuevos trabajos se esperan para 2023, según una encuesta reciente hecho por el Centro de Estudios Turísticos, con sede en Florencia.

No obstante, los expertos de la industria aún no están satisfechos, y están a la espera de desatar un potencial mayor por medio de la Iniciativa de la Franja y la Ruta.

“Esto (la Iniciativa de la Franja y la Ruta) es algo en lo que debemos empeñarnos en hacerlo bien”, indicóMarina Lalli,jefe de la sucursal de turismo del mayor grupo empresarial de Italia,Confindustria.“Hasta ahora, hemos atraído turistas de Asia y de China, especialmente, quienes quieren ver las formas de vida y estilos de Italia, pero esto ya es insuficiente. No podemos descansar en el simple hecho de que tenemos un país hermoso, un clima agradable y buena comida…los intereses de los turistas evolucionan, y el sector se vuelve cada vez más digital”.

“Por ello, necesitamos conocer bien al mercado chino y conocer cómo funciona, para atender sus necesidades y demandas. Es muy sencillo: no podemos perder ese mercado, ni tampoco dejar que grandes cantidades de turistas vengan de China rumbo a Europa y que visiten Italia solo unos días como destino secundario”.