spanish.china.org.cn | 26. 11. 2018 | Editor:Eva Yu | [A A A] |
Por Victoria Argüello
BUENOS AIRES, 25 nov (Xinhua) -- El próximo viaje del presidente chino, Xi Jinping, a América Latina permitirá profundizar el diálogo e intensificar los nexos entre ambas regiones, sostuvo la economista argentina Carola Ramón-Berjano.
Xi llevará a cabo visitas de Estado a España, Argentina, Panamá y Portugal del 27 de noviembre al 5 de diciembre, y asistirá a la XIII cumbre del G20, entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre en Buenos Aires, según anunció el viernes la cancillería china.
La doctora en Economía y especialista en asuntos de China consideró que en los últimos cinco años "los intercambios de alto nivel bilaterales (entre China y América Latina) han ido intensificándose en frecuencia y profundidad".
Sin embargo, añadió que "hay mucho por hacer en esta materia", ya que "la relación apenas comienza".
"Creo que la visita del presidente Xi Jinping a Argentina es de suma importancia, y en el marco de la misma se profundizará el diálogo, el intercambio y acuerdos futuros", dijo.
La también integrante del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales destacó el acercamiento cada vez más estrecho que han propiciado ambas regiones en los últimos años, y que comenzó a materializarse con la primera visita de Xi como mandatario chino a América Latina en 2013.
Ramón-Berjano valoró positivamente el encuentro anunciado que sostendrán el presidente chino con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en Buenos Aires.
"El gobierno argentino ha trabajado mucho durante este año del G20 bajo el lema 'Construir consenso para el desarrollo justo y sostenible', con lo cual la reunión bilateral Xi-Trump se ve reflejada en esta voluntad de construir consensos, partir del diálogo para lograr un mundo más prospero, equitativo y sostenible", expresó.
La economista calificó la Iniciativa de la Franja y la Ruta como "el proyecto más importante de estos tiempos", al asegurar que "tiene el potencial para generar un desarrollo equitativo y equilibrado en el resto del mundo".
América Latina es considerada por China como la extensión natural de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, lo cual, a juicio de la experta, podría traer enormes beneficios a la región en relación a una mayor atracción de inversiones, conectividad y grandes proyectos de infraestructura.
Para la investigadora, "China es un país que ha logrado un éxito impresionante en materia de desarrollo económico en los últimos 40 años", y el mayor aporte de la Iniciativa de la Franja y la Ruta a América Latina sería compartir el "know how" (conocimiento, innovación) en materia de desarrollo nacional.
"Para América Latina y el resto de los países en desarrollo esto es un tema primordial en cuanto a desarrollo sostenible, y a la vez para China esto es también un tema fundamental que contribuye a la reputación de China como impulsor de este nuevo modelo de cooperación internacional", comentó.
Para la docente universitaria, la relación comercial entre China y América Latina "se ha incrementado notablemente".
"China ha inaugurado recientemente en Shanghai la primera Exposición Internacional de Importaciones (CIIE, siglas en inglés) y en la inauguración el presidente Xi mencionó la importancia de esta apertura china que seguirá profundizando dentro del marco de ganar-ganar, facilitando el libre comercio y la inversión", añadió.
La relación económico-comercial entre ambas regiones también se ve fortalecida con la decisión de establecer relaciones diplomáticas con China de cada vez más países de la región latinoamericana, como lo hicieron el año pasado Panamá y este año la República Dominicana y El Salvador, comentó.
"Me parece que para los países de América Latina, así como también para cualquier otro país del mundo, debe estar en su interés tener relaciones internacionales amplias y diversificadas con vínculos de cooperación que también sean diversos", dijo.
China es el segundo mayor socio comercial de América Latina y el Caribe, que al revés es el segundo mayor destino de la inversión directa de China en el exterior, después de Asia, por un total superior a los 200.000 millones de dólares, según datos del Ministerio de Comercio chino. Fin