Una funcionaria francesa en China afirma que en Beijing se siente cada vez más como una china

Hélène Li, funcionaria del Centro de Beijing para Proyectos Públicos, adscrito al Departamento de Educación Superior de Francia, ha estado en China tres años y actualmente es responsable del intercambio cultural entre China y Francia en la Embajada de Francia en China. Recientemente, en una entrevista con China.org.cn, hizo un análisis de su vida y de su trabajo en Beijing, y habló de la comprensión y el sentimiento con respecto a la cultura china, y también de las perspectivas para el año nuevo.

Para Hélène Li, cuando vino a China, lo primero que sintió fue la diferencia entre las culturas china y francesa. “Tomemos el saludo como ejemplo, los saludos franceses prestan más atención a las emociones de los demás, por ejemplo, preguntaremos: ‘¿Cómo has estado últimamente? ’ La forma en que los chinos saludan es más simple y directo.”

Con el paso del tiempo, Hélène Li desarrolló una pasión gradual por la cultura china, especialmente por la cocina tradicional china. Cree que la comida china encierra un conocimiento muy profundo.Tanto en el norte como en el sur hay platos locales representativos que están estrechamente relacionados con la cultura local. Tales como los Jiao Zi, el alimento que no puede faltar en los festivales tradicionales de los habitantes del norte de China. Dice con franqueza que en sus años en Beijing, sus hábitos también han cambiado. “Como Jiao Zi en el solsticio de invierno, y también hago lo mismo para la noche vieja. Cada vez me siento más como una china.”, dice con una sonrisa en la cara.

Sin embargo, al mismo tiempo, Hélène Li cree que la popularidad y la influencia de la cocina china en el mundo necesitan de una mejora adicional. Muchos occidentales no saben mucho sobre la comida china. La razón puede radicar en el hecho de que, aunque hay restaurantes chinos en muchas partes del mundo, la forma de cocinar y el sabor insípido no se pueden comparar con el sabor original nacional. “Así que creo que China puede intensificar su promoción de la cocina tradicional para promover aún más la cultura china”, explica.

Al hablar de su vida en China, lo que ha notado con mayor intensidad son los grandes cambios de los últimos años. En sus recuerdos pasados, mucha gente todavía montaba sus propias bicicletas en 2008 en Beijing, mientras que ahora más gente opta por las bicicletas compartidas.

El desarrollo del ferrocarril de alta velocidad de China en los últimos años no solo es rápido, sino que también ofrece una gran comodidad, y cada día cuenta con más líneas. Todo esto hace que los viajes sean cada vez más convenientes y rápidos. Estos son epítomes del rápido desarrollo de la ciencia y de la sociedad de China.

En 2017, debido a su trabajo, Hélène Li ha tenido más contactos con los medios chinos. Lo que la impresionó más fue que en septiembre encabezó una delegación de medios chinos para recabar información en universidades francesas. Durante ese período, el profesionalismo y la modestia que mostraron los periodistas chinos fueron un incentivo para tratar con ellos.

En 2018, Hélène Li espera llevar a cabo más programas de intercambio y cooperación cultural entre China y Francia, para que más franceses y chinos puedan entenderse, mejorar sus sentimientos y acercarse el uno al otro.