Ministro de Relaciones Exteriores: Deseo que las relaciones sino-estadounidenses superen los obstáculos y avancen hacia un estado de madurez y estabilidad

En una rueda de prensa celebrada el 8 de marzo, Wang Yi subrayó que como dos potencias de gran influencia mundial, la importancia de sus vínculos bilaterales va implícita. Asimismo, indicó que el mantenimiento y el desarrollo de los lazos no solo van en línea con los intereses de ambos pueblos, sino también con los deseos de la sociedad internacional. Sostuvo que los tres comunicados conjuntos han dado como resultado una base sólida para las relaciones bilaterales. Enfatizó además que al mirar hacia el futuro, ambas naciones deben trabajar arduamente para ir más allá. Primero, de la diferencia en el sistema ideológico, puesto que China y Estados Unidos han elegido distintas opciones y caminos de desarrollo. Segundo, del pensamiento tradicional de “juego de suma cero”. China y Estados Unidos cuentan con intereses comunes cada vez mayores y la exigencia de cooperación supera las discrepancias. Wang Yi resaltó que las relaciones diplomáticas se establecieron hace 38 años y que según como dicen a menudo los chinos, “se necesitan 30 años para ser independiente y 40 años para madurar”. El ministro expresó su deseo de que las relaciones puedan dejar de lado antiguas concepciones, abrir nuevos horizontes y avanzar hacia los 40 años de plena confianza, con mayor estabilidad y madurez para tranquilidad de ambos pueblos y de otros países.

Presentadora: Las declaraciones de Donald Trump, como candidato y luego como presidente de Estados Unidos, no siempre fueron de lo más razonables en cuanto a las relaciones bilaterales con China se refiere.Pese a un comienzo un tanto abrupto, ambas potencias parecen haber limado asperezas y han expresado su deseo de dejar los conflictos de lado para concentrarse en un avance conjunto. En ese sentido, Beijing siempre ha apostado por la cooperación en todos los campos y así lo deja claro el ministro de Exteriores.La mejora en los vínculos bilaterales no solo va de la mano con el interés de una de las partes, sino de ambas e incluso de la sociedad internacional en su conjunto.

Vivimos tiempos difíciles pero si algo nos ha enseñado la historia es que la unión y la cooperación logran más resultados positivos que la división y el conflicto; y son justamente los países potencia quienes tienen la responsabilidad de que esto sea así. Las relaciones entre Estados Unidos y China son de larga data, y sus economías son muy interdependientes entre sí. Estoy segura de que ambas naciones encontrarán un terreno común sin importar lo diferente de sus visiones.