El presidente de Cuba Fidel Castro ondeando una bandera nacional durante un día de mayo de 2005 en la Plaza de la Revolución en la Habana.
Cuando hablamos de Fidel Castro, nos viene a la mente una figura política legendaria, una nacionalista inquebrantable o un amigo cercano del pueblo chino.
No obstante, algo en lo que todos coincidimos es que era un líder de gusto “verde”, con una peculiar barba rizada, un uniforme militar verde, boina verde y un puro…siempre.
Era una estilo que no necesariamente portaba en todas las ocasiones. Por el contrario, era una tarjeta de presentación para hacerle ver al mundo que era Fidel Castro y no alguien más.
Algunas personas sugirieron que su sentido del vestir tenía una estrecha relación con años de guerra revolucionaria, pero él siempre lo negó.
“Al usar un traje militar verde uno se ahorra muchos problemas. Todo lo que debo hacer es escoger una camisa y un par de calcetines, lo que me da un sentido amplio de libertad”, dijo en alguna ocasión al ser cuestionado. Al tener que hacer frente a una cantidad considerable de problemas diariamente, Castro también desarrolló el hábito de dejarse crecer la barba en su vida laboral.
“Me ahorro hasta 90 horas al año si no me afeito la barba, y puedo aprovechar el tiempo para hacer más cosas”, declaró Castro en una ocasión durante una entrevista.
El verde significa mucho para un gran líder, pero eso no lo representa todo.
Al tiempo que Cuba se abrió al mundo exterior y el país comenzó a involucrarse en más eventos diplomáticos, Fidel Castro también lo hizo.
En muchas ocasiones, Castro eligió vestirse con ropa de estilo occidental.
“Alto y fuerte, Castro es un hombre de masculinidad. Y un traje de estilo occidental puede mostrar perfectamente su figura”, declaró Bai Xiaoyu, una diseñadora de Beijing. Tras transferir sus responsabilidades a su hermano Raúl Castro en 2006, Castro cambió una vez más su estilo en el vestido. En esta ocasión despertó un gusto por la ropa deportiva.
Su preferencia por la ropa deportiva hizo que muchas de estas marcas estuvieran bajo los ojos de la opinión pública. Las personas bromeaban y decían que Castro debía firmar un contrato con marcas deportivas para ser su portavoz.
En realidad, Castro era un amante del deporte y tenía una pasión por el beisbol. Por ello, no era de sorprenderse ver a un amante del deporte vestido de vez en cuando con ropa divertida.
Según él mismo declaró, fue sometido a una cirugía a una edad avanzada y vestirse con ropa deportiva lo hacía verse más saludable en relación a las otras opciones.
Un senador de Estados Unidos declaró en alguna ocasión: “Fidel Castro se ve muy bien y lleno de energía vistiendo trajes de estilo occidental. No obstante, lo que le va mejor es indudablemente su traje verde”.