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spanish.china.org.cn | 23. 09. 2015 | Editor: Claudia Leng | [A A A] |
A medida que la interacción entre las dos naciones adquiere mayor influencia en cuanto a dar forma al mundo, hay grandes esperanzas en relación con la visita de Xi que muchos comparan con la visita a Estados Unidos de Deng en 1979 que hizo época.
Las dos naciones representan una tercera parte de la producción mundial, una cuarta parte de la población del planeta y una quinta parte del comercio del mundo.
Desde que el viaje fue anunciado en febrero, la asesora de Seguridad Nacional de Estados Unidos Susan Rice, el enviado presidencial chino Meng Jianzhu y otros importantes funcionarios han cruzado el Pacífico varias veces para superar diferencias y preparar el terreno para la visita.
En junio, las dos partes concluyeron su más reciente ronda de conversaciones intergubernamentales de alto nivel con más de 300 resultados concretos.
En una reciente conferencia sobre la visita de Estado, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, dijo que el viaje será fructífero. Los dos países están listos para alcanzar consensos en una amplia gama de ámbitos, incluyendo comercio, energía, finanzas y defensa y para firmar un conjunto de acuerdos de largo alcance.
"El resultado más importante será una inyección de nuevos estabilizadores y la creación de un entorno más favorable sobre asuntos estratégicos", dijo Yang Xiyu, un importante investigador del Instituto de Estudios Internacionales de China, un grupo de expertos con sede en Beijing, citando la actual situación "sutil y compleja" de los lazos entre China y Estados Unidos.
A raíz de la discusión entre China y Estados Unidos sobre el Mar Meridional de China, la seguridad cibernética y otros asuntos, lo cual ha alimentado la inquietud en relación con la llamada trampa de Tucídides, la próxima cumbre entre Xi y Obama representará "un punto de inflexión para bien", añadió Yang.
El más reciente recorrido del presidente chino por Estados Unidos lo llevará a Nueva York para su primera aparición en la sede de la ONU, donde asistirá a una serie de cumbres y conferencias sobre diversos temas como cambio climático, asuntos sobre mujeres y cooperación Sur-Sur, además de que se reunirá con varios líderes nacionales.
Con motivo del 70º aniversario de la fundación de la ONU, se espera que Xi exponga los puntos de vista de China sobre el orden internacional y el desarrollo y gobernanza mundiales, entre otros temas importantes, y que anuncie las principales medidas de Beijing para salvaguardar la paz mundial, promover el desarrollo común y apoyar a la ONU y el multilateralismo.
Todo el viaje de Xi a Estados Unidos "aborda dos cuestiones fundamentales. La primera es el tipo de relación China-Estados Unidos que China espera construir. La segunda es el tipo de orden internacional que China espera construir", dijo Ruan Zongze, subdirector del Instituto de Estudios Internacionales de China.
Durante la visita, China dirá al mundo que está comprometida con ubicar la relación entre China y Estados Unidos en un sendero más saludable y más firme y que es un país constructor y guardián del sistema internacional, añadió Ruan. "Este tipo de mensajes importan".