Por Zhou Jianxiong*
En un simbólico gesto para elevar la concienciación pública sobre las emisiones de gases de efecto invernadero, António de Aguiar Patriota, ministro de Exteriores de Brasil, pasó su propia tarjeta de crédito a través de una tableta iPad el 14 de junio para pagar por las emisiones de estos gases que él mismo ha generado con su desplazamiento a Riocentro. Dos jóvenes voluntarios le ayudaron a calcular la cantidad concreta in situ antes de que el ministro realizara su pago voluntario. Riocentro, o el Centro de Río, es el lugar en el que se celebrará la Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sostenible en Río de Janeiro, Brasil, desde el 20 hasta el 22 de junio.
Un funcionario del Comité Nacional Organizador de Brasil para la conferencia de la ONU, más conocida como Río+20, desglosó en una rueda de prensa posterior que la herramienta en línea para las compensaciones por emisiones de efecto invernadero fue creada por el gobierno brasileño en asociación con la Oficina para Brasil del Programa de Desarrollo de la ONU y Caixa Economica Federal, una institución bancaria del país. La herramienta en línea mostrará a cada participante individual cuántas emisiones de gases han conllevado su viaje a Río de Janeiro, y también les permitirá realizar una compensación o donación por el daño al medio ambiente local. A lo largo de los dos días del evento Río+20, voluntarios con tabletas con acceso a esta herramienta estarán disponibles en todas las sedes de la conferencia para asistir a los donantes.
Los funcionarios también anunciaron que su comité acaba de establecer una unidad especial para analizar, mitigar y compensar cualquier impacto social y medioambiental generado por la organización de la conferencia. Nueve áreas estarán incluidas en este nuevo esfuerzo para impulsar el desarrollo sustentable en Brasil, entre ellas la construcción sostenible, las adquisiciones comerciales sostenibles, el turismo sostenible y la comida sostenible. La unidad empleará además métodos reconocidos internacionalmente para medir las emisiones de Río+20. Las emisiones de gases de efecto invernadero que no puedan ser reducidas, así como las que se generen a consecuencia de la conferencia, como las derivadas del consumo de fuel y la eliminación de desechos, serán también compensadas, según dicho funcionario.
Para que la Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sostenible sea merecedora de su nombre, el comité organizador estuvo intentando actuar de una forma más ahorradora, tanto económica como medioambientalmente. Por ejemplo, en un esfuerzo por reducir las emisiones de efecto invernadero y aliviar la congestión del tráfico, se han establecido entre seis y sietes rutas de autobuses-lanzadera para permitir a todos los participantes desplazarse entre las sedes de la conferencia y los hoteles en los que se hospedan. El personal del evento también ha recibido indicaciones para aconsejar a los delegados que no usen papel, ya que los documentos oficiales circulan con más frecuencia en formato electrónico.
(Reportaje desde Río de Janeiro)