Situada en la pendiente sur de Songshan y construida durante el reinado Zhengguang (520-525) del emperador Xiaoming de la dinastía Wei del Norte, esta pagoda de ladrillos es la más antigua que se conserva en la actualidad. Habiendo experimentado la erosión de viento y lluvia durante 1.480 años, permanece sólida, y no ha sufrido los efectos de la alcalinización, por lo que constituye una brillante muestra de la historia arquitectónica del país.