spanish.china.org.cn | 16. 10. 2018 | Editor:Eva Yu | [A A A] |
Este año marca el 40 aniversario de la puesta en marcha de la política de Reforma y Apertura de China. Según información proporcionada por la Administración Nacional de Estadísticas de China, hay una marcada tendencia al alza en las cifras que resultan de las vinculaciones comerciales y de la cooperación entre el gigante asiático y el resto del mundo. Desde el comercio de bienes y servicios, pasando por la apertura y la incorporación de China en el comercio mundial, hasta el establecimiento de lazos comerciales con la comunidad de naciones, la derrama económica y los beneficios no solo se reparten entre los chinos sino entre la comunidad de naciones de los cinco continentes.
De 1978 a 2017, el comercio de bienes se caracterizó por un acelerado aumento. Si bien sorprenden las 198 veces que se multiplicó el total arrojado por las importaciones y exportaciones, más lo es el salto de 20 mil 600 millones a 4,1 billones. El promedio anual de crecimiento del boyante comercio de bienes fue de 14, 5 por ciento. En este mismo periodo, los socios de China pasaron de 40 países y regiones a sumar un total de 231. Entre los socios principales están la Unión Europea (UE), los Estados Unidos (EE.UU), los países de la ANSEA y Japón. Aunque desde 2004, la UE y los EE.UU se han colocado como los principales socios durante 14 años consecutivos.
Un hito de este proceso integrador, bajo el marco de la política de Reforma y Apertura, fue la incorporación de la economía china en la Organización Mundial del Comercio (OMC). Catapultada por la seriedad y honestidad de China al momento de impulsar las zonas económicas especiales, la integración en el organismo comercial dejó ver al mundo la capacidad de China por construir un sistema comercial de amplio beneficio para todos. Ha sido la actitud de China para honrar sus compromisos que la comunidad de naciones ha recibido positivamente el llamado de la nación asiática para participar en la construcción de la Franja y la Ruta.
La incorporación plena de China en el comercio internacional ha hecho que la nación asiática sea, desde 2014 y durante 4 años consecutivos, el segundo máximo exponente en el comercio de servicios e importaciones. En el periodo que va de 1982 a 2017, las importaciones se multiplicaron 230 veces y registraron un crecimiento anual de 16,8 por ciento. En cuanto a las exportaciones, estas se multiplicaron 84,4 veces y revelaron un promedio anual de crecimiento de13,5 por ciento.
La inversión extranjera directa al igual que el comercio de servicios e importaciones registró una marcada tendencia al alza. En 1983, la cifra sumaba aproximadamente 2 mil 260 millones, mientras que en el periodo de 2013-2017, la Inversión Extranjera Directa (IED) llegó a los 658 mil millones. En este mismo periodo, la industria de servicios empleó 417 mil 400 millones de dólares de IED, con un crecimiento anual de 9,6 por ciento. En 2017, el uso de capital extranjero en la industria de alta tecnología sumó 27,4 por ciento de la cifra total, 13,6 puntos porcentuales más alto que en 2012.
Un hecho clave que ha fungido como catalizador es la mejora de las condiciones para los inversores extranjeros. Antes de 2014, todos los proyectos de inversión extranjera fueron verificados y aprobados. Hoy en día, más del 96 por ciento de los proyectos de inversión extranjera pueden ser gestionados en las áreas locales. Asimismo, China también ha aumentado su partida de inversiones en el exterior. En el periodo 1982-2000, la inversión directa de China en el extranjero sumó 27 mil 800 millones, con una inversión promedio anual de mil 460 millones. Y en el periodo 2002-2017, la inversión directa de China en el extranjero sumó 1,11 billones. Para finales de 2017, el valor bursátil de la inversión directa de China en el extranjero fue de 1,48 billones, y el total de activos en empresas extranjeras llegó a los 5 billones.
La cooperación económica internacional no ha sido la excepción en este cúmulo de cifras ascendentes. De 2002 a 2017, la suma acumulada de contratos para proyectos establecidos con el extranjero llegó 1,98 billones, con 1,34 billones en facturaciones completadas. Un punto que vale la pena resaltar es el de la cooperación orientada a la capacidad de producción. En el periodo 2015-2017, la inversión en equipo industrial que China destinó a la fabricación llegó a 35 mil 100 millones, lo que equivale a un 51,6 por ciento de la inversión extranjera en fabricación. A finales de 2016, China tenía inversiones directas en el extranjero en 190 países y regiones, lo que equivalía al 81 por ciento del total mundial.
El compromiso de China con el multilateralismo y por la construcción de un mundo globalizado e interconectado se corona con el lanzamiento de la iniciativa de la Franja y la Ruta. En el periodo 2015-2017, la inversión acumulada de China en países adscritos a la Franja y la Ruta llegó a 48 mil 600 millones. Esta suma mantendrá en los próximos años una tendencia ascendente toda vez que cada vez más jefes de estado expresan su interés por incorporarse a esta iniciativa y a viajar junto con China en el tren del desarrollo.