Motivos de orgullo chino tras 40 años de reforma y apertura

Este año marca el 40° aniversario de la reforma y apertura de China. El desarrollo de China desde el inicio de la reforma y la apertura es extraordinario. De hecho, China ha elegido un camino que le ha permitido al país alcanzar un nivel de desarrollo sin precedentes y acercarse al centro de la escena mundial.

Es indiscutible que China ha experimentado un cambio tremendo en las últimas cuatro décadas. Por ejemplo, China se ha convertido en la segunda economía más grande del mundo. En 1978, el PIB de China ascendió a $ 150 mil millones, representando solo el cinco por ciento del total mundial. A finales del año pasado, esa cifra superó los $ 12 trillones, un 15 por ciento del total mundial. Además, la economía masiva de China continúa creciendo a un ritmo acelerado y algunos analistas predicen que el PIB de China superará los 13 mil millones de dólares en 2018. Equivalente aproximadamente al tamaño de las economías de Japón, Alemania, el Reino Unido y la India combinadas.

El rápido desarrollo económico de China ha tenido un impacto positivo significativo en la calidad de vida de la población china, sacando de la pobreza a casi 800 millones de personas, o aproximadamente dos veces y media la población de los Estados Unidos, desde el comienzo de la reforma y la apertura. Además, los esfuerzos del gobierno para enfrentar la pobreza han ganado fuerza bajo el mando del presidente chino Xi Jinping, quien se ha comprometido a erradicar la pobreza en el país para finales de la década a través de medidas específicas de alivio de la pobreza. En los últimos 40 años, China ha pasado de ser uno de los países más pobres del mundo a ser el mayor contribuyente al crecimiento mundial, destacando el éxito del camino chino.

Los frutos de las reformas económicas en los últimos 40 años se ven por doquier, desde la fortaleza del sistema de educación superior de China hasta la transformación del país en una potencia tecnológica para la fenomenal red ferroviaria de alta velocidad de China. Ahora es difícil imaginarlo, pero hubo un tiempo en que China solo tenía un servicio de trenes de alta velocidad. En agosto de 2008, poco antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos de verano, China inauguró el servicio de tren de alta velocidad Beijing-Tianjin. Tras una década de rápido avance, China tiene de lejos la red ferroviaria de alta velocidad más grande del mundo; y para 2020, se espera que esa red masiva alcance los 30.000 kilómetros. Para ponerlo en perspectiva, la circunferencia de la Tierra alrededor del paralelo del ecuador es de aproximadamente 40.075 kilómetros.

La transformación de China en los últimos 40 años ha sido notable, pero China sigue siendo un país en desarrollo. Muchos chinos todavía luchan por satisfacer sus necesidades básicas, especialmente en las zonas rurales, y algunos servicios públicos importantes son inferiores a los de los países desarrollados. Además, aunque China es la segunda economía más grande del mundo, su población es de aproximadametne 1.400 millones de personas, o aproximadamente el 18% de la población mundial, que tienen que compartir dicha riqueza. China todavía tiene un largo camino por recorrer antes de convertirse en un "país desarrollado", pero nadie puede negar el hecho de que el camino del desarrollo chino ha producido numerosos logros notables.

El presidente chino Xi Jinping expresó una vez que un camino correcto conduce a un futuro brillante. Las últimas cuatro décadas han sido un viaje verdaderamente histórico, no solo para China, sino para el mundo. Después de 40 años de reforma y apertura, China tiene mucho de qué enorgullecerse. Los logros de China y la mejora en los niveles de vida de sus 1.400 millones de personas nos han demostrado que el camino chino actual es sin duda el camino correcto.