"El fraude comercial puede ser abatido a través de la supervisión del gobierno. Pero es una pena que algunos gobiernos locales se hagan de la vista gorda ante el fraude con efectos en sus propios intereses", dijo Qian Xueming, miembro del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh).

Debido a que no existe un sistema de lista negra que se pueda consultar en el país, los infractores pueden desplazarse de un lugar a otro sin ser seriamente sancionados, dijo Qian.

Una dificultad mayor para el impulso del sistema crediticio es el compartir información, dijo Liu.

Los bancos tienen sistemas de crédito y listas negras, pero fuera de ellos no pueden accesar de manera fácil, añadió Liu.

Numerosas regiones han estado construyendo sus propios sistemas de listas negras.

En la provincia nororiental china de Liaoning, las empresas que han violado leyes de protección ambiental no sólo estarán en la lista negra de los organismos supervisores del ambiente, sino también en la de las instituciones financieras.

En enero, el Consejo del Estado anunció que hará mejoras en su sistema de crédito social.

Además, urgió al establecimiento de una norma nacional para la recolección y el manejo de información para compartir datos de crédito local e incrementar la transparencia en el sistema social de crédito.

He Ping es el jefe de la empresa plástica Taizhou Hengyida en la provincia de Zhejiang. Hace dos años, su empresa registró un incendio el mismo día que requería pagar créditos obtenidos en línea.

A la mañana siguiente, Ping logró devolver los pagos.

Explicó a un prestamista de pequeños créditos sobre su demora de un día. El prestamista continuó dándole nuevos créditos con base en un buen historial crediticio y aún le redujo las tasas de crédito para ayudarlo a superar los días malos.

"El Internet ha hecho más fácil dar seguimiento al récord crediticio. Espero que la construcción de una red de sistema crediticio social puede acelerarse", dijo. Fi