China reestructurará la Administración Nacional de Energía (ANE) para racionalizar el sistema administrativo y regulador del sector energético, de acuerdo con un informe presentado hoy domingo el consejero de Estado Ma Kai ante la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional (APN), la máxima legislatura del país.
Las funciones de la Comisión Estatal Reguladora de Electricidad, que será disuelta, serán asumidas por la nueva ANE, dijo Ma.
Las principales responsabilidades de la administración serán elaborar e implementar las estrategias, planes y políticas de desarrollo energético, proporcionar asesoramiento sobre la reforma del sistema energético y regular el sector, explicó Ma.
La reestructuración tiene como objetivo "promover aún más el desarrollo y la reforma del sector energético y fortalecer su supervisión y regulación", agregó el consejero de Estado.
La ANE se creó en 2008 en la última reforma institucional del gobierno como un órgano subordinado a la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR).
La nueva administración permanecerá bajo la jurisdicción de la CNDR, que se centrará en coordinar la planificación del sector energético con la planificación del desarrollo económico y social, añadió Ma.
"China es un gran consumidor de energía. Es de enorme importancia garantizar la seguridad energética nacional y el desarrollo del sector de la energía", de acuerdo con un comunicado de la Oficina de la Comisión Estatal para la Reforma del Sector Público.
China consumió 3.620 millones de toneladas equivalentes de carbón estándar en 2012, con un aumento anual del 3,9 por ciento, anunció el Buró Nacional de Estadísticas en febrero.
El año pasado, los consumos de carbón, petróleo crudo, gas natural y electricidad del país crecieron respectivamente un 2,5, 6, 10,2 y 5,5 por ciento frente a lo registrado el año anterior.
"La electricidad es una importante forma de energía, y mantener el sector de la electricidad fuera de la jurisdicción de la ANE ha resultado en la superposición de funciones y responsabilidades entre la ANE y la Comisión Estatal Reguladora de Electricidad, lo que supone una desventaja para la planificación integral del sector energético y el desarrollo de la industria de la electricidad", según explicó el comunicado.
Las obligaciones solapadas de las dos agencias incluyen la reforma del sector de la electridcidad, así como la entrada de inversión, la aprobación de proyectos y la fijación de precios en el sector, según la misma fuente.