Zhou hizo estos comentarios tras una pregunta sobre si China aplicaría una apreciación del yuan para reducir el alza de los precios en el interior del país.
La política de tipos de interés, sin embargo, sigue siendo una herramienta útil para rebajar la inflación, aunque una subida de tipos podría conllevar un mayor flujo de capital especulativo hacia el país, respondió Zhou en una rueda de prensa paralela a las sesiones de la APN.
“China continuará impulsando la reforma del tipo de cambio del yuan de forma autónoma, controlada y gradual para incrementar la flexibilidad de la tasa de cambio”, dijo Zhou.
El índice de precios al consumidor (IPC) de China, uno de los mayores indicadores de la inflación, aumentó un 4,9 por ciento en febrero, respecto al mismo mes del año pasado, una cifra igual a la de enero, según anunció el viernes el Buró Nacional de Estadísticas (BNE).
“Utilizaremos los precios y herramientas cuantitativas como los tipos de interés, los requisitos de las reservas bancarias y operaciones de mercado abiertas para mantener la liquidez adecuada en el sistema bancario”, indicó en un comunicado previo a su encuentro con la prensa.
“China implementará unos requisitos de ratio dinámicos diferenciados para las reservas con el fin de guiar un crecimiento estable y moderado del dinero y el crédito”, indicaba el documento.