(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Ayer sábado, las autoridades chinas anunciaron los objetivos para construir capacidades de generación de 235 millones de kilovatios de energía limpia durante los próximos cinco años, en un esfuerzo por reducir la excesiva dependencia de los combustibles fósiles.
Desde 2011 hasta 2015, China planea lanzar proyectos de energía nuclear con una capacidad combinada de generación de 40 millones de kilovatios. Además de impulsar la construcción de plantas nucleares en las zonas costeras, otras nuevas plantas serán construidas en las regiones centrales, según el borrador del gobierno para el XII Plan Quinquenal.
El borrador será debatido y aprobado por los legisladores nacionales durante la IV sesión de la XI Asamblea Popular Nacional en Pekín.
El país también planea construir estaciones hidroeléctricas a lo largo de grandes cursos de agua, como los ríos Jinsha, Yalong y Dadu, con una capacidad instalada de 120 millones de kilovatios.
Además, según el plan, para el próximo lustro se crearán al menos 70 millones de kilovatios de capacidad de energía eólica y 5 millones de kilovatios de energía solar.
El país planea construir seis grandes bases eólicas continentales y otras dos en las zonas costeras, y proyecta plantas solares localizadas principalmente en el Tíbet, Mongolia Interior, Ningxia, Gansu, Qinghai, Xinjiang y Yunnan.
Respecto a los combustibles fósiles, el borrador indica que China elevará su eficiencia energética en el uso del carbón, mantendrá el volumen actual de producción petrolera doméstica y facilitará un aumento rápido en la producción de gas natural.
Además, China construirá oleoductos y gasoductos con una longitud de 150 mil kilómetros en los próximos 5 años. Los ductos incluirán un gasoducto hacia Asia Central y oleoductos hacia Kazajistán y Myanmar.
China ha crecido hasta convertirse en el líder mundial en producción y uso de energías, según la Sociedad de Investigación Energética de China. El consumo energético anual del país totalizó 3.250 millones de toneladas equivalentes en carbón en 2010, una cifra que supone un 5,9 por ciento más que en el año anterior.
No obstante, la mezcla energética de China, donde el carbón supone entorno al 70 por ciento del consumo energético total, ha puesto al país bajo una gran presión a la hora de luchar contra el cambio climático y proteger el medio ambiente.
Zhang Guobao, antiguo jefe de la Administración Nacional de Energía, citado por la agencia oficial Xinhua, afirmó que China busca incrementar la proporción de combustibles no fósiles en el uso primario total de energía hasta un 11,4 por ciento en 2015.