Incitar a la gente a autoinmolarse es una conducta criminal y constituye un "delito de homicidio" de acuerdo con la ley china, dijo hoy Losang Gyaltsen, el vicepresidente de la región autónoma del Tíbet, en el marco de una serie de autoinmolaciones ocurrida en meses recientes en áreas de la etnia tibetana.
El alto funcionario tibetano realizó esta declaración al asistir al XVIII Congreso Nacional del Partido Comunista de China (PCCh) en Beijing.
Algunas de las autoinmolaciones fueron tramadas e instigadas por secesionistas en ultramar y por las fuerzas a favor de la "independencia del Tíbet", quienes han "glorificado" a las víctimas al llamarlas "héroes", dijo.
"De acuerdo con la ley china, los actos como incitar a la gente a que se quite la vida constituyen un crimen de asesinato intencional", dijo Losang Gyaltsen, un delegado del congreso del PCCh.
"La vida es preciosa. Sacrificar la vida de la gente para lograr unos objetivos políticos ocultos contradice la conciencia y la moralidad de los seres humanos, y debe ser condenado enérgicamente", añadió Losang Gyaltsen, quien también es delegado del congreso del PCCh.
Qiangba Puncog, también delegado del Partido y presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular de la región autónoma del Tíbet, dijo que las fuerzas de ultramar usan y sacrifican a los monjes para magnificar el efecto.
"Estamos muy tristes por eso", afirmó. "Matar o usar a otros para cometer homicidio está prohibido por el Budismo tibetano".
Li Changping, otro delegado del congreso del PCCh y funcionario tibetano de la provincia suroccidental china de Sichuan, dijo que el decimocuarto Dailai Lama debe ser culpado por los incidentes.
"Es el decimocuarto Dalai Lama quien debe responder su pregunta sobre la causa de las autoinmolaciones, porque él quien está detrás de estos incidentes", dijo Li, un miembro del Comité Permanente del Comité Provincial de Sichuan del PCCh, al responder a la prensa.
"Nací en el área tibetana, donde he trabajado durante mucho tiempo. Como tibetano, tengo la oportunidad de estar en contacto con tibetanos todos los días, incluidos con lamas venerados", afirmó.
"Sus reacciones hacia las autoinmolaciones pasan por tres etapas: al comienzo, quedan perplejos y consternados; después, sienten que los incidentes son detestables, y ahora, están indignados", afirmó. Fi